La DGT está embarcada en una revolución silenciosa que afectará a cómo nos movemos por las ciudades. Apostando por una movilidad más eficiente y segura, propone fomentar la ocupación mínima de dos personas por coche en núcleos como Madrid, emulando políticas europeas de carriles VAO. Esta iniciativa busca reducir atascos, emisiones y, de paso, mejorar la convivencia urbana.
Junto a ella, sobre la mesa figuran otras medidas polémicas: limitar un coche por vivienda o cobrar una tasa diaria a los no residentes en Islas Baleares. Aunque estén aún en análisis, todas marcarán un antes y un después en la forma de entender el desplazamiento particular.
8Fase de consulta y debate público

Aunque la mayoría de medidas están en estudio, la DGT ha abierto procesos de consulta con ayuntamientos, comunidades y asociaciones de conductores. Durante el próximo año se recogerán opiniones y experiencias piloto. Solo tras ese diálogo se aprobará el reglamento definitivo y las fechas de entrada en vigor.
Los plazos son ajustados: antes de 2025 se fijarán detalles tecnicos y económicos. Después, vendrá la fase de adaptación legal y de comunicación masiva para que nadie pueda alegar desconocimiento. La transición aspira a ser ordenada y gradual.