El gazpacho es un plato tradicional de la gastronomía andaluza, cuya historia se remonta a los tiempos de los romanos y musulmanes en la península ibérica. Originalmente, el gazpacho se preparaba con pan, ajo, aceite de oliva, vinagre y agua, ingredientes que eran destacados en la dieta de los campesinos andaluces. Con el tiempo, la receta fue evolucionando e incorporando ingredientes frescos y locales como tomates y pimientos, que le dieron el característico color rojo del gazpacho tradicional.
La popularidad del gazpacho ha crecido enormemente, convirtiéndose en un símbolo del verano en España, especialmente en Andalucía. Con el tiempo, se han desarrollado numerosas variantes, incorporando ingredientes como frutas y verduras diversas, lo que ha permitido una gama de sabores que se adaptan a los gustos modernos.
El gazpacho verde, en particular, es una versión más ligera y nutritiva que utiliza verduras de hoja verde y aguacate, ofreciendo una alternativa refrescante que combina sabor y salud. Esta receta es perfecta para los meses de calor, ya que es muy hidratante y rica en vitaminas.
3Variantes del gazpacho verde

El gazpacho verde con aguacate es una receta versátil que permite diversas variantes. Algunas ideas incluyen:
– Gazpacho de mango: Agrega trozos de mango a la mezcla para aportar un toque tropical y dulce.
– Gazpacho con manzana verde: Sustituye parte del pepino por manzana verde para un sabor refrescante y ácido.
– Gazpacho picante: Si te gusta el picante, añade un poco de jalapeño o chile serrano a la mezcla.
– Gazpacho con frutas: Mezcla diferentes frutas, como kiwi o piña, para darle un giro afrutado a la receta clásica.