El pescado a la sal es una de esas recetas que, a pesar de su sencillez y pocos ingredientes, ofrece un resultado espectacular tanto en sabor como en presentación. Esta técnica ancestral de cocción no solo es sorprendentemente fácil de dominar, sino que también garantiza un pescado increíblemente jugoso y lleno de su sabor natural.
La técnica de cocinar alimentos envueltos en sal es antiquísima, remontándose posiblemente a civilizaciones como los fenicios o los romanos, quienes ya utilizaban la sal no solo como conservante sino también en sus cocinas. En las regiones mediterráneas, donde la sal y el pescado fresco siempre han sido abundantes, esta forma de preparación se consolidó. Originalmente, más que una técnica culinaria refinada, era un método práctico para cocinar el pescado de manera uniforme, aprovechando la capacidad de la sal para crear una costra que sellaba los jugos y aromas. Con el tiempo, esta humilde preparación se ganó un puesto de honor en la gastronomía, valorada por su capacidad de resaltar la pureza del producto.
6Acompañamientos: clásicos y modernos

El pescado a la sal, con su sabor puro, no necesita acompañamientos muy complejos que lo enmascaren.
- Sencillos y efectivos:
- Patatas al vapor o hervidas: Simplemente aliñadas con un buen aceite de oliva virgen extra, sal en escamas (¡poca!) y perejil picado.
- Verduras de temporada: Espárragos trigueros a la plancha, judías verdes hervidas, brócoli al vapor, pimientos asados, zanahorias baby glaseadas.
- Ensalada verde fresca: Con una vinagreta ligera de limón o vinagre suave.
- Salsas (servidas siempre aparte):
- Alioli suave o mayonesa casera: Un clásico que nunca falla. Puedes darle un toque de ajo asado a la mayonesa o añadirle hierbas frescas.
- Salsa tártara ligera.
- Vinagreta de cítricos y hierbas frescas: Con zumo de limón, naranja, aceite de oliva, eneldo, cebollino.
- Un excelente aceite de oliva virgen extra de baja acidez, simplemente para rociar por encima del pescado una vez limpio.
- Guarniciones más Elaboradas:
- Escalivada: Pimientos, berenjenas, cebolla y tomate asados y aliñados.
- Samfaina o pisto de verduras.
- Un sencillo arroz blanco o un arroz pilaf aromático.