Las migas extremeñas son un plato emblemático de la cocina tradicional española, especialmente en la región de Extremadura. Este sabroso plato, hecho a base de pan, es conocido por su textura reconfortante y su capacidad para adaptarse a los ingredientes disponibles. Las migas han sido históricamente un alimento de los campesinos y pastores, convirtiéndose en una joya gastronómica que se disfruta tanto en celebraciones como en comidas diarias. En este artículo, profundizaremos en la historia del plato, los ingredientes necesarios, la receta paso a paso y sugerencias de acompañamiento.
Las migas tienen sus raíces en la cultura rural de España, donde se desarrollaron como una forma de aprovechar el pan que se había quedado duro. Se cree que las primeras migas se remontan a la Edad Media, cuando los labradores y pastores necesitaban una comida sustanciosa que fuese fácil de transportar y preparar. La adaptación de las sobras de pan, junto con ingredientes locales, dio como resultado un plato versátil y nutritivo.
En Extremadura, las migas se elaboran de manera tradicional con pan de pueblo, aceite de oliva, ajo y, a menudo, se les añaden embutidos o verduras según la disponibilidad y la preferencia personal. Este plato se ha mantenido presente en las costumbres de la región, no solo como alimento, sino como un símbolo de comunidad y celebración, a menudo disfrutado en reuniones familiares o festividades locales.
4Consejos para cocinar las migas

– Usa pan de calidad: Utiliza pan del día anterior, ya que el pan fresco no tendrá la misma capacidad de absorción y textura durante la cocción.
– Controla el fuego: Mantén el fuego medio-bajo durante la cocción para evitar que las migas se quemen. Es importante remover con frecuencia.
– Personaliza el sabor: Puedes añadir diferentes especias o incluso un toque de picante con guindilla si así lo prefieres.
– Congelar las sobras: Si te sobra migas, puedes guardarlas en un recipiente hermético en el refrigerador. Se pueden recalentar y son igualmente deliciosas.