En un reciente informe sobre la economía europea, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha instado al Banco Central Europeo (BCE) a adoptar una política monetaria más relajada, con el objetivo de mantener ancladas las expectativas de inflación y evitar una política demasiado restrictiva.
El informe señala que las perspectivas de inflación pueden cambiar con el tiempo a medida que se disponga de más información, lo que, a su vez, puede repercutir en el curso adecuado de la política monetaria. Sin embargo, el FMI reconoce que, en última instancia, las decisiones del BCE dependerán de la información disponible.
Recomendaciones del FMI al BCE
El FMI recomienda que el BCE «relaje» su política monetaria y rebaje los tipos de interés hasta dejarlos en torno al 2,5% a finales del tercer trimestre de 2025. Según el organismo, esta relajación monetaria continuada y gradual permitiría mantener ancladas las expectativas de inflación y evitar una política monetaria demasiado restrictiva.
Esta recomendación se basa en las perspectivas de desinflación que el FMI prevé para la economía europea. Sin embargo, el informe advierte que estas perspectivas pueden cambiar a medida que se disponga de más información, lo que, a su vez, puede repercutir en el curso adecuado de la política monetaria.
El Consejo de Gobierno del BCE decidió el primer recorte de los tipos de interés en la eurozona desde 2019 el pasado 6 de junio, de forma que la tasa de referencia para sus operaciones de refinanciación se quedará en el 4,25%, la tasa de depósito bajará al 3,75% y la de facilidad de préstamo al 4,50%. La presidenta de la institución, Christine Lagarde, avanzó que seguirá aplicando un enfoque dependiente de los datos y reunión por reunión, ya que aún faltan meses «difíciles» y el camino por delante estará «lleno de baches».
Perspectivas de Inflación y Política Monetaria
El informe del FMI señala que las perspectivas de inflación pueden cambiar con el tiempo a medida que se disponga de más información, lo que, a su vez, puede repercutir en el curso adecuado de la política monetaria. Esto significa que el BCE deberá estar atento a los datos económicos y estar dispuesto a ajustar su política monetaria en función de la evolución de la inflación.
Además, el FMI reconoce que, en última instancia, las decisiones del BCE dependerán de la información disponible. Esto implica que el banco central deberá tomar en cuenta una amplia gama de indicadores económicos y financieros para determinar el curso adecuado de la política monetaria.
Por lo tanto, el FMI insta al BCE a mantener una política monetaria flexible y adaptativa, que le permita responder de manera oportuna a los cambios en las perspectivas de inflación y en las condiciones económicas generales.
Perspectivas a futuro
En resumen, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha instado al Banco Central Europeo (BCE) a adoptar una política monetaria más relajada, con el objetivo de mantener ancladas las expectativas de inflación y evitar una política demasiado restrictiva. El FMI recomienda que el BCE rebaje los tipos de interés hasta dejarlos en torno al 2,5% a finales del tercer trimestre de 2025, en base a las perspectivas de desinflación que prevé para la economía europea.
Sin embargo, el informe advierte que estas perspectivas de inflación pueden cambiar con el tiempo, lo que, a su vez, puede repercutir en el curso adecuado de la política monetaria. Por lo tanto, el FMI insta al BCE a mantener una política monetaria flexible y adaptativa, que le permita responder de manera oportuna a los cambios en las condiciones económicas.