Carlos Torres (BBVA) encara días decisivos con el mensaje del ‘ahorro’ en la operación Sabadell

BBVA se la juega. El jueves se cumplen los 14 días naturales que tiene la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para comunicar si admite o no trámite la opa de la entidad que preside Carlos Torres sobre Banco Sabadell.  Es un punto decisivo para el banco, que hace una apuesta muy fuerte por crecer en España como vía para reducir riesgos en México y Turquía. El banco insiste en que la opa se ofrece con canje de acciones, sin efectivo para los accionistas de Banco Sabadell. Torres trata de que llegue el mensaje a los accionistas de ambas entidades sobre las bondades de la operación.

Una operación, según Torres, buena por el valor que creará para los accionistas procedentes de Banco Sabadell y que no costará un euro a los de BBVA porque el banco no piensa ‘poner’ cash sino solo ‘papel’ para convencer a los poseedores de títulos de la entidad que preside Josep Oliu.

LO QUE LE FALTA A BBVA EN CUANTO A TRÁMITES

El visto bueno del BCE a la operación, convencer a los accionistas de Banco Sabadell de que acudan a la opa, las exigencias que pueda poner la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y, por último, lo que decida el Gobierno sobre la fusión son otros pasos importantísimos que le quedan a BBVA en esta carrera.

El pasado 24 de mayo BBVA presentó formalmente a la CNMV la solicitud para que admita a trámite a la operación, en la que propone a los accionistas del Sabadell un canje de una acción de BBVA por cada 4,83 del banco de origen vallesano

El BBVA presentó formalmente el pasado 24 de mayo la solicitud con la que espera tener el visto bueno de la CNMv

A partir de entonces, el banco tenía 7 jornadas hábiles para remitir el resto de la información y la CNMV un total de hasta 14 días laborables para admitir a trámite el folleto de la operación. El último día es este jueves.

BBVA también ha pedido al Banco Central Europeo (BCE) su aprobación para lanzar la opa, algo que ha hecho con el supervisor bursátil y con la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

Además, BBVA envió su solicitud igualmente a la Autoridad de Regulación Prudencial del Reino Unido, PRA por sus siglas en inglés, ya que el Banco Sabadell es dueño en el país de TSB, así como a los supervisores de Francia y Marruecos, donde la entidad tiene oficinas de representación.

LO QUE SE JUEGA TORRES

Más allá de los trámites, importantísimos, Carlos Torres afronta una operación decisiva para el banco y para él mismo, que, según fuentes financieras se juega mucho en esta operación, por la apuesta tan fuerte que supone.

 BBVA

Hay varios puntos clave relacionados con los accionistas. El primero es convencer a los poseedores de títulos del banco de que aprueben en junta extraordinaria la ampliación de capital de cara a la opa. La cita es el próximo 5 de julio. Torres está poniendo mucho énfasis en que no habrá coste para los accionistas del banco. Torres, por vídeo y carta, ha recordado a los accionistas que esta ampliación no supondrá desembolso alguno por su parte. Asimismo, subraya que “la unión de ambas entidades reforzará nuestro posicionamiento y escala en el mercado español, y así conseguiremos una mayor eficiencia y rentabilidad”.

Hay varios puntos clave relacionados con los accionistas. El primero es convencer a los poseedores de títulos del banco de que aprueben en junta extraordinaria la ampliación de capital de cara a la opa

El presidente de BBVA recuerda a sus accionistas que “por un lado, formarán parte de un banco más fuerte y competitivo; y, por otro, conseguirán elevados retornos de la inversión con un limitado impacto en el ratio de capital”. Y hace hincapié en que “todo ello se une a nuestra atractiva política de remuneración al accionista, que supone repartir entre el 40% y el 50% de nuestro beneficio. Además, tenemos la intención de distribuir cualquier exceso de capital por encima del 12%”.

LOS MINORITARIOS

Por el lado de los accionistas de Banco Sabadell, la fuerza del valor BBVA es el argumento fundamental con el que trata de convencerles de que vayan al canje aunque no haya parte del pago en efectivo, un punto en el que BBVA no parece dispuesto a cambiar.  Este es el punto que fuentes del mercado consideran que es el que más puede complicar que la opa salga adelante. El 47% del capital social del banco está en manos de minorista y el 53% en manos institucionales. Con los fondos puede ser suficiente para sacar adelante el visto bueno del 50,01% del accionariado y sacar adelante la opa.

En este campo, la operación tiene en contra a los empresarios de Cataluña, la Comunidad Valenciana y Murcia, así como a los Gobiernos de estas tres comunidades autónomas.  El Gobierno Central se opone a la fusión, pero si Competencia, da el visto bueno con condiciones, el Ejecutivo que preside Pedro Sánchez tendrá complicado defender su rechazo a la fusión.

Si la operación no sale, BBVA apostará por el crecimiento orgánico.