domingo, 29 junio 2025

La mayoría de las empresas alemanas defienden la imposición de aranceles a China y advierten sobre posibles despidos

La competencia china es una de las principales preocupaciones para las empresas europeas, especialmente en Alemania. Según un informe del Instituto Económico Alemán (IW), más de nueve de cada diez empresas alemanas consideran la competencia procedente de China un gran desafío para sus negocios.

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La competencia china: un ajuste de precios del 30%

Las empresas chinas son capaces de competir con precios un 30% más bajos que las europeas. Esto se debe a los subsidios gubernamentales que ofrece el Ejecutivo chino a la innovación y el desarrollo de sus empresas nacionales. Al menos la mitad de las empresas alemanas afirman que la competencia china ofrece unos productos comparables a los producidos en territorio germano con un descuento del 20%. Esto enfrenta el dilema de bajar los precios y asumir el incremento de costes o perder cuota de mercado a favor de los productores extranjeros.

La presión competitiva china: una amenaza para la industria alemana

El 63% de las compañías alemanas encuestadas dicen sentir una «fuerte presión» competitiva de China y consideran que no compiten en igualdad de condiciones. La competencia china ha llevado a muchas empresas a perder clientes y a una caída de los beneficios. Entre el 60% y el 95% de las encuestadas ven complicado volver a obtener las cifras de negocio de años pasados. Esto ha llevado a una serie de medidas dramáticas, como recortar la producción, despidos y deslocalizaciones para seguir adelante.

La industria manufacturera en peligro

En el sector industrial, las empresas manufactureras amenazan con más recortes de puestos de trabajo como resultado de la competencia de China. De hecho, ya representan poco menos del 23% de los aproximadamente 7,5 millones de empleados en este sector.

La guerra comercial con China: un futuro incierto

Las empresas alemanas están preocupadas por la probabilidad de una guerra comercial con China con motivo de un estallido del conflicto de Taiwán en los próximos diez años. La probabilidad de una guerra comercial es alta, alrededor del 70%. La mayoría de las empresas apoyan la imposición de aranceles a los vehículos eléctricos chinos subsidiados y la posible prevención de la transferencia de tecnología sensible.

La decisión de la UE: un futuro incierto para los vehículos eléctricos chinos

La Comisión Europea debe decidir sobre la aplicación o no de aranceles a los vehículos procedentes de China. Si se aplican, se prevé que el número de vehículos eléctricos chinos importados a la UE se reduciría en una cuarta parte, lo que afectaría a marcas como Porsche o Mercedes-Benz.

La respuesta china: una amenaza para las relaciones comerciales

China no ha anunciado oficialmente ninguna represalia, aunque Pekín ha señalado que está dispuesta a imponer aranceles de hasta el 25% a los automóviles importados con motores de gran cilindrada. Esto ha llevado a una escalada comercial entre Bruselas y Pekín que podría terminar costándole a las empresas chinas cerca de 4.000 millones de euros en relaciones comerciales con los países del viejo continente.

En resumen, la competencia china es un desafío importante para las empresas europeas. Es importante que estas empresas sean capaces de competir con precios más bajos y mejorar su eficiencia para mantener su cuota de mercado.


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