Inglot se ‘cuela’ en Primor con juicios pendientes y deudas

Inglot volvió a entrar el pasado mes de marzo en los establecimientos de Primor con muebles y lineales nuevos llenos de productos– Lo hizo después de que hace tan solo un año MERCA2 sacara a la luz el ‘pufo’ de Inglot, que debía altas cantidades de dinero a sus empleados y también a la firma de perfumería y cosmética Primor.

La marca de cosméticos polaca fundada en 1983 se alió con Primor en 2014-2015 para tener presencia en todo el mercado español y expandirse. Una de las cosas más llamativas de Inglot es el ‘Freedom System’, que permite fabricar a los consumidores sus propias paletas personalizadas, de sombras de ojos, de colorete, polvos, correctos e incluso en fragancias.

En 2023, después de los problemas y el dinero que dejaron a deber a Primor, salieron del negocio, pero volvieron a entrar en establecimientos físicos de la mano de Druni, donde todavía siguen presentes tanto en las tiendas como de forma online. Un hecho que llamo la atención de las trabajadores que no entendían lo que estaba pasando ni lo que iba a pasar a medio plazo. Pero ya han observado que pese a que la empresa polaca sigue debiendo dinero y están en medio de juicios, tanto Druni como Primor han hecho oídos sordos.

Inglot 1 Merca2.es
Mueble de Inglot en Druni.

EL CONTEXTO DEL PUFO DE INGLOT

Los empleados de Inglot contaban con contratos indefinidos, pero de la noche a la mañana les comunicaban vía correo electrónico que había un problema con Primor y no se podían hacer cargo de las nóminas de sus empleados. María, nombre ficticio de una empleada que se puso en contacto con MERCA2, explicó que tras estos correos electrónicos, la firma polaca enviaba a los empleados a irse de vacaciones hasta nuevo aviso y que después les comunicaban que como no podían pagar estaban despedidos.

María explico el caso de otro compañero al que obligaban a darse de baja de una de las sociedades que tenía Inglot, para darle de alta en otra sociedad instrumentales. El caso es que muchas de las empleadas de la cadena polaca cuando las contrataron las asociaron a otras sociedades de este tipo, como era ‘2613 SL’ o ‘Trendy Things’. En el caso que explica María, se trataba de Trendy Things y Simaol Gestión.

INGLOT JUGABA CON SUS SOCIEDADES instrumentales PARA No PAGAR A LOS TRABAJADORES

Además, no era un cambio de sociedad que corría a cargo de Inglot. Es decir, la empresa pedía al trabajador que escribiera una carta de baja voluntaria para que así la firma polaca no tuviese que abonarle el finiquito de lo que había trabajado en la primera sociedad en la que estaba asociado su contrato. Ante esta situación,  la empresa polaca declaró su sociedad en suspensión de pagos y creó otra nueva para dificultar que las personas que no han cobrado no puedan reclamar el dinero que les deben. 

CAPTURA INGLOT Merca2.es
Captura facilitada a MERCA2 por una trabajadora de Inglot.

El cambio de sociedad complicaba que el trabajador pudiera recibir un plus de antigüedad y el finiquito por el trabajo realizado. Lo que sí le deberían de haber pagado eran tanto las vacaciones, como en este caso también el kilometraje. «El cambio de sociedades era una herramienta que solían usar muy a menudo, ya que en la principal sociedad en la que estábamos la gran mayoría de empleados en Primor tenían una gran deuda», explica María.

LOS JUICIOS PENDIENTES DE INGLOT Y LAS DEUDAS

«En los juicios pendientes que tienen al no haber querido pagar las nóminas de las empleadas de Inglot, los representantes de la compañía polaca no se están presentando. Y si se presentan los abogados que van no tienen ni idea de a que vienen. Una gestión injustificable», explica uno de los ex-empleados a la que debe dinero Inglot.

Los empleados tienen miedo por los juicios que todavía no se han llevado a cabo. Muchos no tienen para mantenerse, no pueden pagar hipoteca y no pueden hacerse cargo económicamente de sus hijos. Una situación insostenible que les ha llevado a crear una cuenta ‘inglotjusticia.trabajadores’ en Tiktok e Instagram para hacer ruido y que se solucione rápidamente.

LOS DESPIDOS MASIVOS DE INGLOT DEJARON A 100 EMPLEADAS SIN COBRAR LA NÓMINA NI EL FINIQUITO

Además, hay que añadir que no solo debían dinero a las empleadas. Inglot en verano de 2022 le pidió dinero a Primor porque no tenían suficiente para comprar productos y llenar sus estantes. El presidente de Primor, Juan Ricardo Hidalgo, les prestó el dinero con la condición de luego les devolvieran el dinero con parte del beneficio de esos productos. El presidente de Primor no volvió a saber nada de ese dinero, no le devolvieron nada alegando que no tenían dinero, cosa que no era cierta.

MERCA2 se ha puesto en contacto con Primor para entender cómo han dejado entrar de nuevo a Inglot en el negocio sabiendo todo lo que lleva detrás esta empresa.Primor no ha respondido a las preguntas de este medio. La compañía de perfumería y cosmética ha vuelto a contratar a la firma que le dejó a deber una gran cantidad de dinero y que daño la imagen de la empresa.

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El problema es que Inglot ha vuelto a entrar en Primor con los estantes llenos hasta arriba y con una gran cantidad de stock tanto en los establecimientos físicos como en la propia página web de la firma polaca y tanto en Primor como en Druni. Un hecho que enfada todavía más a las empleadas que se preguntan como han podido rellenar los estantes y conseguir dinero para volver a contratar a trabajadoras, sin pagar las deudas que tienen todavía con las que eran empleadas.

Si bien, es cierto que como hemos podido observar desde MERCA2, los precios de los productos de Inglot tanto en tienda física como en las páginas web, no cuentan con el precio completo, es decir, todos los productos se están vendiendo con promociones y ofertas. Esto muestra la necesidad de la firma polaca por vender los productos y empezar a ingresar dinero.

Un año después, Inglot sigue debiendo dinero a sus trabajadores. Pero, pese a las deudas, están ya contratando nuevo personal, llenando los estantes de Primor y Druni con productos, y con estands y muebles renovados. Una incoherencia que, según uno de los trabajadores, hace complicado creer que no tienen dinero y, por ese motivo, no se presentan a los juicios.