El Vía Crucis de Pallete para conseguir la desregulación de las telecos

Las telecos están en pie de guerra y el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, se ha erigido como el caballero andante de las empresas del sector en Europa que lucha por conseguir una desregulación que las deje respirar, crecer e invertir en redes para que el viejo continente no se quede atrás respecto a otras regiones, y que las grandes tecnológicas (las GAFAM) aporten y no solo aprovechen las redes.

Desde el comienzo de este año, Álvarez-Pallete ha argumentado y reivindicado a Bruselas públicamente, cada vez que ha tenido la oportunidad, que se produjeran cambios en materia de competencia en el sector de las comunicaciones porque, según ha proclamado con rotundidad, «somos la última esperanza de Europa en materia de tecnología».

LA ÚLTIMA PARADA

La última parada de este Vía Crucis reivindicativo se produjo cuando, recientemente, los operadores móviles europeos y la Asociación GSM, presidida precisamente por el presidente de Telefónica, que aglutina a todas las operadoras a nivel mundial y organiza la Mobile World Congress (MWC), lanzaron al mundo «Conectar Europa hasta 2030: un manifiesto de la industria móvil para Europa».

En el manifiesto no solo se describe una visión estratégica para el sector de la conectividad móvil en Europa, si no que se pide con contundencia «reformas políticas críticas para garantizar que la economía digital de Europa, respaldada por una innovación de red fuerte y sostenida, que pueda restablecer una posición de liderazgo en la carrera tecnológica global para 2030«.

la gsma ha lanzado al mundo «Conectar Europa hasta 2030: un manifiesto de la industria móvil para Europa» en el que piden reformas políticas críticas

Según esta asociación, la región europea se encuentra en un momento crucial por la mayor competencia nivel global, las crecientes barreras comerciales y la carrera entre bloques por la supremacía tecnológica. Con el manifiesto las empresas de telecomunicaciones se empoderan, se ponen en valor y destacan el papel fundamental de la industria móvil en el avance de la agenda digital de la UE, al aspirar como región a una cobertura 5G universal para 2030.

Pero dejan claro que hay trabas y barreras que deben desaparecer. Para ello habría que «abordar desafíos sistémicos, incluida la fragmentación del mercado, los obstáculos regulatorios y las barreras a la inversión«, que según inciden hasta ahora han sofocado el crecimiento y la competitividad del sector europeo de las telecomunicaciones.

Con el escrito, las telecos de los 27 instan, o casi exigen, a los responsables políticos de la UE adoptar un nuevo marco de infraestructura digital que fomente la inversión, la innovación y un mercado digital armonizado. Las recomendaciones incluyen abordar la fragmentación del mercado de telecomunicaciones, implementar una política de espectro más favorable a la inversión, cerrar las brechas regulatorias entre los diferentes proveedores de servicios digitales y actualizar las reglas históricas para reflejar las realidades actuales.

El Vía Crucis de Álvarez-Pallete para conseguir la desregulación de las telecos
José María Álvarez-Pallete, junto a sus compañeros líderes de las telecos en Europa.

TELECOS: DESREGULACIÓN Y MENOR FRAGMENTACIÓN

Álvarez-Pallete también lo dijo alto y claro en Bruselas este mismo lunes día 18, hasta donde acudió para celebrar que el próximo 19 de abril la empresa que dirige cumplirá 100 años tratando de conectar personas y empresas en España, desde el primer cable de telefonía de cobre que arrancó a funcionar hace un siglo.

En esta última parada del Vía Crucis, el directivo reclamó a los diputados y miembros de Consejo Europeo que quisieran escucharle un «uso responsable de los recursos compartidos», en clara alusión a las tecnológicas, para que «todos los actores asuman su parte de responsabilidad» y pidió de nuevo un proceso de «desregulación» del sector para poder «competir con el mismo servicio, las mismas reglas y obligaciones» que sus rivales.

«Ya no somos un monopolio, ya no somos incumbentes, y la nuestra ya no es una red de cobre. Es hora de desregular. Déjennos competir. Mismo servicio, mismas reglas, misma obligación», sostiene pallete

No se cortó el directivo español al señalar a las grandes tecnológicas globales, las GAFAM, cuando habló de que hoy en día «seis actores consumen hoy más del 50% de la capacidad de las telecomunicaciones, por lo que es necesario que todos los agentes asuman su parte de responsabilidad».

También destacó otro detalle que no hay que pasar por alto, que ya es hora «de superar la clara asimetría de Europa con respecto a otras regiones antes de que sea demasiado tarde. Tenemos que movernos rápido -dijo- y prepararnos para afrontar el futuro con confianza. Millones de empresas y ciudadanos europeos dependen de nosotros. Necesitan más de nosotros», poniendo toda la carne en el asador sobre lo que las telecos están dispuestas a seguir aportando.

Álvarez-Pallete contó en esta parada reivindicativa con la presencia de del alto representante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell; la presidenta del Banco Europeo de Inversiones (BEI), Nadia Calviño; el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario para la protección del estilo de vida europeo, Margaritis Schinas.

Aprovechó el presidente de Telefónica para empoderar su compañía y proclamar sus máximas reivindicativas al decir que «en Telefónica estábamos regulados porque éramos un monopolio incumbente en cobre. Ya no somos un monopolio, ya no somos incumbentes, y la nuestra ya no es una red de cobre. Es hora de desregular. Déjennos competir. Mismo servicio, mismas reglas, misma obligación«.

Y la proclama continuó contundente: «Europa necesita un sector de las telecomunicaciones robusto y sostenible. Necesitamos que las instituciones europeas lo permitan. Necesitamos una definición adecuada de los mercados relevantes y de la escala en el mercado. Necesitamos un nuevo enfoque de la regulación«, dijo Álvarez- Pallete.

ÁLVAREZ-PALLETE REIVINDICATIVO

Tan solo unos días antes de mostrarse así de firme en Bruselas, el presidente de la operadora azul ya había subido un poco el tono de sus peticiones durante su intervención en el III Foro de Indesia. Tampoco allí se mordió la lengua y expuso los problemas a los que tanto telecos como sociedad nos estamos enfrentando.

Dijo que el tráfico de datos crece «exponencialmente» y las empresas del sector no pueden ser «un cuello de botella» ante esta oportunidad, porque lo que estamos viviendo es cuatro veces el tamaño de la mayor revolución que ha habido hasta la fecha, que fue la revolución industrial«. Y puso como ejemplo la irrupción de ChatGPT, que como herramienta ha tenido de repente un uso masivo y claro, para que todo funcione hacen falta redes de última generación y si no se aprovecha esta oportunidad, se generará una brecha entre empresas que se adapten y las que no, afectando en casi un 40% los niveles de productividad.

Apenas una semana antes, otra parada de la procesión reivindicativa se produjo durante la inauguración de la MWC a finales del mes de febrero, en la que hizo de maestro de ceremonias como presidente bianual de la GSMA que es, donde estuvo flanqueado y apoyado por el consejero delegado de Deutsche Telekom, Tim Hoettges, la consejera delegada del grupo Vodafone, Margherita Della Valle y la consejera delegada del grupo Orange, Christel Heydemann.

Tenemos que afrontar una brecha de inversión de 200.000 millones de euros, y podemos hacerlo, pero algo va mal y es necesario arreglarlo. Necesitamos un nuevo régimen regulador

Allí evidenció ante el mundo y los reguladores europeos, con un mensaje contundente dirigido en especial a la férrea comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager. «Somos la última esperanza de Europa en materia de tecnología. Tenemos que ser capaces de poder hacer nuestro trabajo. Tenemos que afrontar una brecha de inversión de 200.000 millones de euros, y podemos hacerlo, pero algo va mal y es necesario arreglarlo. Necesitamos un nuevo régimen regulador«.

Ya sonaba la queja fuerte durante la presentación de resultados de la teleco azul el 22 de febrero, cuando tanto Álvarez-Pallete, como el CEO de Telefónica, Ángel Vila reconocían que con la fusión de Orange y MásMóvil y la presentación del «libro blanco» algo podía cambiar en su sector, pero también aprovecharon para lanzar un mensaje contundente en contra de la desfasada regulación de las telecos en las UE que no ha dejado de sonar desde entonces: «no necesitamos protección y sí que nos dejen competir en igualdad de condiciones. Telefónica ya no es un monopolio, ni es incumbente, ni tendremos cobre», en relación al apagado de la vieja red de telecomunicaciones .

Marian Alvarez
Marian Alvarez
Periodista con más de 30 años de experiencia, desde la Gaceta del Norte, Diario 16 Aragón, Tele 5, Localia, About.com del New York Times y Computer World. Informadora corporativa en BQ y consultora de comunicación. Ahora cuento el presente y el futuro tecnológico en Merca2.