Editores eternos, clientelismo y ‘Telegaita’ en la Galicia que acude a las urnas

Fai un sol de carallo para ser febrero, pero las eternas lluvias resisten en la bella Galicia antes de que la ciudadanía, de resaca carnavalera, acuda a las urnas el próximo 18 de febrero tras haber visto las intervenciones de los principales candidatos a ocupar San Caetano en el debate que anteanoche emitió la Televisión de Galicia (TVG).

Un 18% de share alcanzó este especial emitido en una cadena autonómica que el mes pasado, según datos de Kantar Media, promedió el pasado mes un 10,2% (lo cual le convierte en la tercera señal de la FORTA más vista).

Alfonso Sánchez Izquierdo, designado por Alberto Núñez Feijoo, controla con mano de hierro esta influyente cadena pública que emite los ‘Telexornal’ con una línea editorial favorable al PP, el inagotable ‘Luar’ que combina actuaciones de Isabel Pantoja o las verbenas que recorren la Galicia rural durante los veranos, y ‘Land Rober Tunai Show’, liderado por el ‘Juan y Medio gallego’, Rober Vilar.

Este cómico arrasa entre la chavalería con su show en prime time. Por el mismo desfiló hace unas semanas el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, falto de carisma y ayuno del foco que le proporcionó el programa producido por el singular empresario palestino Ghaleb Jaber Ibrahim, tan comprometido con su tierra de origen con la TVG a la que proporciona contenidos desde hace casi cuatro décadas.

TENSIONES EN LA TELEVISIÓN AUTONÓMICA DE GALICIA

La autonómica, fundada en 1985, modelada a lo folclórico por Manuel Fraga y conocida popularmente como ‘Telegaita’, designó como moderador del debate electoral a Alejandro López Carballeira, subdirector de Informativos e investigado por un presunto delito de acoso moral y contra los derechos laborales de una trabajadora de Radio Galega.

El Comité Intercentros de la Corporación Radio e Televisión de Galicia, por otra parte, denuncia la «represión contra los trabajadores díscolos que le plantan cara a la dirección o se ponen a las prácticas de manipulación informativa».

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Federico Jiménez Losantos.

Durante más de doscientos ‘viernes negros’ se desgañitaron los trabajadores de la Corporación gallega tan favorable al PP como los saraos electorales que se celebrarán en Galicia gracias a dinero público, véase la emisión especial este próximo viernes 9 de un programa de ‘Es la mañana’ de Federico Jiménez Losantos en en la Sala Curuxeiras sito en el Puerto de Ferrol.

La Autoridad Portuaria de Ferrol-San Cibrao, controlada políticamente por la Xunta de Galicia, pagará decenas de miles de euros por este programa de Es Radio por el que desfilarán Alfonso Rueda (aspirante a mantener la presidencia de la Xunta), Alberto Núñez Feijóo (aspirante a mantener la presidencia del PP), el alcalde de Ferrol José Manuel Rey (por supuesto, del PP) y el presidente del Puerto de Ferrol, Francisco Barea Paz, designado en el cargo por Feijóo.

DE ‘TELEGAITA’ AL SHOW DE ABEL CABALLERO

Galicia, al igual que Cataluña, cuenta con un voto dual: se vota más a la derecha en las autonómicas que en las generales o municipales. Y es que las principales urbes gallegas están en manos de fuerzas progresistas como el pujante Bloque Nacionalista Galego o el PSdG en el que ejerce como estrella el populista navideño Abel Caballero.

Caballero rebasa el 60% del voto en Vigo imitando los peores tics telepredicadores de la política sudamericana, no hay más que ver el consultorio ciudadano que presenta, ‘Vigo de cerca’. El programa se emite en Televigo, que otorga un cariño tan similar al alcalde socialista como el que proporciona el decano de la prensa española, Faro de Vigo de la camaleónica Prensa Ibérica (afín al PSOE, al PP o al que mande en las regiones en las que editan periódicos de papel).

En el ecosistema mediático gallego no solo brilla Vigo, sino que Ourense cuenta con un apartado propio. En la ciudad de As Burgas conviven el baltarista La Región, que a punto estuvo de ser rescatada con 2,7 millones de euros por la Diputación de Ourense controlada durante más de tres décadas por la polémica familia Baltar (que aseguró que querían comprar la hemeroteca del medio). 

Lo evitó una atinada demanda en tribunales de un populista ‘robinhoodesco’ llamado Gonzalo Pérez-Jácome, que creó una televisión local, Auria TV, gracias a la cual creó un minúsculo partido, Democracia Ourensana, con la que en 2019 alcanzó la alcaldía tras pactar… con sus antaño enemigos, los Baltar.

La Región se revolvió contra Jácome antes de las últimas municipales con unos audios que, según el citado periódico, evidenciaban que Democracia Ourensana se financiaba con dinero público surgido por las mordidas a contratistas del Concello regido por la formación localista.

Pero aquel obús no inmutó a Jácome, que destrozó todas las encuestas y ahora aspira a colocar alguno de sus peones en el Parlamento de Galicia. Esta formación, tapada en las encuestas, puede dar la gran sorpresa el 18F.

LA VOZ DE GALICIA

Ni La Región, Auria TV, Faro de Vigo o incluso la TVG se acercan siquiera al gran altavoz mediático de la tierra, La Voz de Galicia, nacido en 1882 como órgano de expresión republicano y progresista que devino en vigía ultraconservador del noroeste español en el siglo pasado.

En los últimas décadas, este medio, intenta otorgar guiños centristas de la mano de su eterno editor, Santiago Rey Fernández-Latorre, que hace dos décadas años aparcó sus planes de retirada tras una gresca familiar y, hoy en día, a sus 85 años, se mantiene al frente del timón del periódico líder en la autonomía gallega. 

A esta fuerza viva gallega se le presume una afinidad al PP que no casa con sus ‘amores’ con el alcalde socialista coruñés Paco Vázquez, que llegó a oficiar la segunda boda del editor, o su enemistad con el influyente exdirigente ‘popular’ y expresidente del Deportivo de la Coruña, Augusto César Lendoiro, que aseguró que «La Voz de Galicia vive, ha vivido y vivirá de los impuestos revolucionarios».

La Voz de Galicia se llegó a enfrentar al ‘SúperDepor’, que a cuenta de la guerra creó su propio periódico en papel, y Rey Fernández-Latorre también se las vio contra Abel Caballero, que denunció «la falsedad, el fascismo y el antiviguismo informativo» del diario hegemónico.

Santiago Rey Fernández-Latorre ha atenuado sus guerras, de hecho ahora goza de una gran sintonía con Caballero, y en los últimos tiempos se ha replegado en el periódico autonómico tras fracasar en su salto a Madrid a finales de los años noventa con Diario 16 (al que adquirió cuando el periódico estaba en su estertores) o Radio Voz (hoy convertida en una radio regional gallega hermana de La Voz…). 

El editor de La Voz de Galicia también intentó crear su propia ‘TVG’, V Televisión, que cerró en 2018 tras provocar un agujero de 15 millones de euros. Parte de sus trabajadores reforzaron la productora Voz Audiovisual, hoy proveedora privilegiada de la propia TVG.