A lo largo de siglos, las murallas han resguardado a la humanidad de las amenazas externas. Por ejemplo, la Muralla china protegió al país de invasiones extranjeras desde el siglo V a. C. En la Edad Media, también funcionaron como símbolo de la fuerza militar y económica de un reino o para delimitar territorios bajo legislación. Sin embargo, con la llegada de la Edad Moderna y el uso de la pólvora junto a nuevas tácticas de asedio, estas estructuras fueron perdiendo gradualmente relevancia hasta volverse obsoletas.
8MURALLAS DE URUEÑA, EN VALLADOLID
Urueña, ubicada en la provincia de Valladolid, Castilla y León, es un tesoro histórico con uno de los cascos urbanos mejor conservados de la región, brindando a sus visitantes la experiencia de una pequeña ciudad medieval. En 1975, fue reconocida como Conjunto Histórico-Artístico debido a su impresionante patrimonio.
Este municipio guarda la esencia de su pasado a través de la muralla que rodea la ciudad, construida en los siglos XII y XIII, caracterizada por mampostería franqueada por cubos semicilíndricos. Esta muralla, que abarca el 80% del recinto amurallado en una superficie de casi 7 hectáreas, se adapta al escarpado borde del páramo donde se asienta Urueña. Con su almenado y camino de adarve, es un testimonio tangible de la arquitectura defensiva medieval.
Urueña presume de dos puertas notables: la Puerta del Azogue, principal y orientada al norte, construida en codo para una defensa eficaz, y el Arco de la Villa, ubicado al sur y menos protegido arquitectónicamente debido al abrupto descenso del páramo hacia el valle. Además, la localidad conserva parte de su castillo, casonas de calidad, y la iglesia gótico-renacentista de Santa María del Azogue, junto con joyas fuera del casco urbano, como los tradicionales palomares y la ermita santuario de Nuestra Señora de la Anunciada, un destacado ejemplo del románico catalán en la meseta castellana.
