Los altos ejecutivos de la energía anticipan un escenario de fusiones ‘movido’

Hace unas semanas, Chevron y ExxonMobil, dos de los mayores colosos petroleros del planeta, anunciaban sendos ‘bombazos’ casi simultáneos: la compra de Hess y Pioneer, respectivamente. Poco después, en MERCA2 nos hacíamos eco del renovado murmullo sobre una posible unión entre Shell y BP (la antigua British Petroleum), y ahora son los mismísimos altos mandos de la energía quienes se suman a la tendencia: casi nueve de cada 10 espera un escenario ‘movido’ de fusiones y adquisiciones en el sector el próximo año.

El dato procede de según un estudio realizado por la multinacional de servicios jurídicos CMS a ejecutivos de energéticas y capital privado. Dicho informe denota «un notable optimismo», ya que para un 87% de los altos mandos de empresas energéticas entrevistados el panorama de oportunidades para llevar a cabo fusiones y adquisiciones mejorará. Una opinión compartida por el 82% del total de ejecutivos interpelados.

En el primer semestre de 2023 el valor del volumen de este tipo de operaciones fue de 12.600 millones de dólares (11.944 millones de euros), menos de la mitad de las registradas en el mismo periodo del 2022, con 29.900 millones de dólares (28.3434 millones de euros).

Desde el prisma de las empresas energéticas, el informe DENOTA «un notable optimismo», ya que para un 87% de los entrevistados las previsiones DE GRANDES OPERACIONES MEJORARÁN.

Los ejecutivos de capital privado también esperan oportunidades en el sector, y el 67% afirma que las condiciones mejorarán, mientras que el resto de los encuestados espera que se mantengan, al menos, en el mismo nivel mostrado en lo que llevamos de ejercicio.

Para la socia y co-jefa del Grupo de Infra y Proyectos internacional de CMS, Elena Aguilar, el sector en España «se ha recuperado considerablemente en los últimos meses, y unos objetivos gubernamentales en materia de reducción de emisiones cada vez más ambiciosos, acompañados de los correspondientes programas de incentivos y políticas, debieran seguir generando oportunidades de inversión en España».

Por su parte, el jefe del grupo de Energía y Cambio Climático, Munir Hassam, ha comentado que mientras que algunos perciben «un reciente ablandamiento del mercado debido a aspectos como la volatilidad de la cadena de suministro o el aumento de precios de las materias primas, el informe refleja una mejora por parte de los inversores en el sector energético europeo»

De hecho, con la actual coyuntura económica, el 64% de los encuestados ha afirmado que aumentará su inversión en este sector, mientras que un 33% afirma que la mantendrá y tan solo un 3% tiene previsto desinvertir.

ENERGÍA SOLAR, ALMACENAMIENTO Y RIESGOS

Según se pone de manifiesto en el informe, un 34% de los encuestados considera que la energía solar es la principal oportunidad de inversión, mientras que para el 70% de los encuestados estaría entre las tres primeras.

Además, la necesidad de baterías y almacenamiento a medida con sistemas energéticos que evolucionan hacia fuentes de energía más intermitente «es evidente», por lo que el 57% de los encuestados lo sitúan entre sus tres subsectores más atractivos.

EL INFORME DE CMS SEÑALA QUE LOS ELEVADOS TIPOS DE INTERÉS Y LA MAYOR CAUTELA DE LOS BANCOS SUPONEN UN RIESGO PARA LA FINANCIACIÓN

El estudio de CMS apunta, a su vez, que el principal riesgo para el sector de la energía se encuentra en la cadena de suministro, ya que un 72% de los encuestados lo consideran uno de los tres principales obstáculos para que esta industria continúe siendo atractiva para los inversores.

En segundo lugar, se encuentra el riesgo de financiación, con un entorno económico marcado por elevados tipos de interés y una mayor cautela por parte de los bancos y entidades financieras, además del contexto geopolítico actual.

José Sánchez Mendoza
José Sánchez Mendoza
Periodista especializado en economía y mercados energéticos. Licenciado en Derecho por la Universidad Complutense y máster en Periodismo por El Mundo y la Universidad San Pablo CEU, he trabajado en medios como El Mundo y El Economista, entre otros.