El diésel y la gasolina dan un respiro, pero pueden repuntar un 2%

A la espera de los sustos que pueda darnos el enrevesado baile entre el petróleo y la convulsa situación geopolítica, el mercado de los carburantes parece seguir el paso del crudo, que por el momento no ha enloquecido. El precio medio del litro de diésel ha puesto fin a su sostenido ascenso veraniego, registrando su primer descenso semanal en tres meses: un ínfimo 0,3%, que junto al desplome del 1,86% de la gasolina certifican una relativa placidez en un contexto de carestía general. Sin embargo, la contención pende de un hilo, y los analistas temen que una hipotética escalada de la violencia en Oriente Medio haga explotar los precios.

Las bajadas colocan al diésel en los 1,682 euros por litro, mientras que la gasolina está en los 1,719 euros, según los datos publicados el Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE). En cualquier caso, el precio de ambos carburantes continúa por encima de los niveles en los que se situaba antes de la invasión rusa de Ucrania, que comenzó el 24 de febrero de 2022. En aquel entonces, el diésel estaba a 1,479 euros por litro y la gasolina a 1,594 euros por litro.

UN POSIBLE REGRESO A LOS PRECIOS DE LOCURA

De todas maneras, a pesar de esta tendencia al alza de los últimos meses, ambos productos están lejos de los máximos que registraron hace más de un año, cuando en julio de 2022 la gasolina alcanzó los 2,141 euros y el gasóleo los 2,1 euros. Precisamente en este entorno sitúa sus previsiones más pesimistas el Grupo Moure.

Desde el holding energético no descartan que el precio de los carburantes retome su senda alcista a raíz del conflicto estallado en Oriente Medio entre el Estado de Israel y el grupo terrorista Hamás. A día de hoy, el precio del petróleo ya ha subido más de un 3%: por un lado el barril de Brent, de referencia en Europa, se ha disparado un 3,6% y el West Texas, su homónimo en EEUU, asciende hasta un 3,7%. «Por ahora es demasiado pronto para saber si el precio de la gasolina y el diésel volverá a coger la senda de los 2 euros por litro», advierte el director general de Grupo Moure, Manel Montero, quien destaca la importancia de que el conflicto no crezca a nivel geográfico para evitar nuevas subidas de precios.

Para el experto, los precios no deberían subir mucho si la situación no traspasa la Franja de Gaza, pues la situación actual de reservas en los países, así como la implantación de nuevas energías de movilidad es positiva. «Por eso es muy importante la figura de Irán, pues si se escala el conflicto a otros países la contención del precio será más complicada», añade.

La existencia de esta tipología de problemas en territorios en los que el petróleo tiene un peso tan importante dificulta mucho la contención de los precios, explican.

LA GASOLINA, MÁS CARA EN 2023

Con los precios actuales, el llenado de un depósito medio de 55 litros de gasolina asciende actualmente a unos 94,5 euros, frente a los 83 euros (11,5 euros menos) que costaba a estas alturas del pasado año, incluyendo el descuento de 20 céntimos por litro que estaba vigente hace un año.

En el caso del gasóleo, el llenado de un depósito medio de 55 litros supone actualmente unos 92,5 euros, uno euro y medio menos que los 91 euros que costaba en el mismo periodo de 2022, incluyendo el descuento de ese momento.

EL PRECIO DEL DIÉSEL YA ENCADENA 34 SEMANAS CONSECUTIVAS POR DEBAJO DEL DE LA GASOLINA, COMO ANTES DE LA GUERRA DE uCRANIA

El año pasado, la escalada en el precio de los carburantes por la crisis energética provocada por el conflicto bélico, obligó al Gobierno a establecer la bonificación mínima de 20 céntimos por litro de combustible para todos los ciudadanos, dentro de su plan de respuesta al impacto de la guerra en Ucrania.

Igualmente, con ésta, el diésel suma 34 semanas seguidas por debajo del precio de la gasolina. Se mantiene así en la situación habitual de antes de la invasión rusa de Ucrania, que provocó que el precio del gasoil fuese más caro que el de la gasolina de forma continuada desde agosto de 2022 y hasta mediados de febrero de este año, cuando se rompió esa dinámica.

El precio de los carburantes depende de múltiples factores, como su cotización específica (independiente de la del petróleo), la evolución del crudo, los impuestos, el coste de la materia prima y de la logística y los márgenes brutos. Además, la evolución en la cotización del crudo no se traslada directamente a los precios de los carburantes, sino que lo hace con un decalaje temporal.

GASOLINA Y DIÉSEL DE SALDO

Con estos niveles, el precio de la gasolina sin plomo de 95 se mantiene en España por debajo de la media de la UE, situada en 1,790 euros el litro, y de la Eurozona, con un precio medio de 1,866 euros.

En el caso del diésel, el precio en España también es inferior al de la media de la UE, que es de 1,773 euros, y de la zona euro, donde marca un precio de 1,827 euros.