Beber agua con regularidad no asegura una vida más saludable y prolongada, sin embargo, no consumir la cantidad adecuada de líquidos (que no necesariamente son dos litros) puede tener consecuencias graves para el cuerpo. Es posible comprenderlo de manera más sencilla al recordar que aproximadamente el 65% de nuestra composición corporal es agua, y esta desempeña funciones cruciales como eliminar desechos a través de la orina, las heces y la transpiración, mantener la temperatura del cuerpo, además de brindar protección y amortiguación a los órganos vitales.
1SOLO EL 2% DE DESHIDRATACIÓN YA AFECTA AL ORGANISMO
Sin embargo, no siempre seguimos este principio, y nuestro propio cuerpo nos señala cuando algo no está funcionando correctamente debido a una ingesta insuficiente de agua. Por ejemplo, cuando la deshidratación supera el 2% del peso corporal, tanto el rendimiento como la capacidad laboral se ven mermados, especialmente cuando se trabaja en condiciones de calor.