En medio de La Mancha, en la provincia de Ciudad Real se encuentra una pequeña pero importante reserva natural: El Parque Nacional de las Tablas de Daimiel. Probablemente, muchos sean conocedores de la fama que los paisajes creados por el embalse de Daimiel tienen, formando unos de los paisajes más fascinantes del territorio español gracias a la mezcla entre los humedales, los numerosos árboles y arbustos que cobijan a la fauna de La Mancha. Pero el parque nacional es mucho más que eso.
El Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, situado al suroeste de la provincia y escondida en La Mancha, cobija a la naturaleza en la isla que divide el embalse en dos, de una extensión de 17 kilómetros cuadrados donde el paisaje se alterna entre el marco árido de la zona y la presencia de agua en abundancia. Y es por su belleza que el parque fue declarado como Reserva de la Biosfera por la UNESCO en el año 1992.
4Recorridos turísticos

En el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel hay dos recorridos: el Recorrido de la Isla y el Recorrido del Rabo de Zorro. El recorrido de la Isla con una extensión de 9’3 km, es el más famoso. Está pensando como un viaje particular, que uno se hace a sí mismo durante unas 2 o 3 horas para escuchar la tranquilidad de los bosques y contar con la posibilidad de recorrer algunas de las pequeñas playas que hay en la isla.
Por otra parte, el recorrido de El Rabo de Zorro es una ruta más pequeña de unos 2 km de longitud y está destinada a recorrer, el tramo de la zona del embalse. Se puede realizar por tierra o por agua. En este recorrido, se pueden divisarlo diversas especies como el Ánsar común, el Ánsar collalba, el Águila pescadora e incluso el pato malvasía.