Puede haber pausa por parte de la Reserva Federal (Fed) con un pico en los tipos de interés en el 5,5%, mientras que la decisión del Banco Central Europeo (BCE), cuyo Consejo de Gobierno se reúne el 14 de septiembre, pende de un hilo, según los analistas consultados por MERCA2. Las espadas de los tipos están en todo lo alto y empresas y usuarios esperan la decisión de los bancos centrales. Los expertos ven muy posible que no haya movimiento en lo referido a los tipos de interés.
EL CONTEXTO PARA LA ACCIÓN DE LA FED Y EL BCE
«En este contexto, no parece que, a pesar de depender de las publicaciones macro, los bancos centrales vayan a apostar por una nueva alza de tipos de interés». Esta es una de las posiciones que han expuesto desde el ámbito de los analistas. «En el caso del BCE, siguen existiendo dudas, pues sólo el 53% descuenta que no habrá subida de tipos, dejando la tasa en el 3,75%. Aunque es mayoría, el porcentaje no refleja una certeza y todavía podría haber sorpresas por parte de Christine Lagard», apunta el analista de XTB, Dario García.
El punto determinante es la inflación. Al respecto, el economista jefe de AXA IM, Gilles Moëc, señala que «es cierto que la inflación excluidos la energía y los alimentos se desaceleró 0,2 puntos porcentuales en agosto, pero se ha mantenido en el corredor del «5%+» en el que lleva revolcándose desde diciembre de 2022.
Si se utilizan los datos desestacionalizados del BCE, la variación anualizada a tres meses de los precios tanto de los servicios como de los bienes manufacturados
«Si se utilizan los datos desestacionalizados del BCE, la variación anualizada a tres meses de los precios tanto de los servicios como de los bienes manufacturados incluso ha repuntado en agosto. Esta semana queremos conocer todo el discurso del BCE previo al Consejo de Gobierno antes de pronunciarnos definitivamente sobre el resultado de la reunión del 14 de septiembre. Reconocemos que nuestra visión de una última subida de 25 puntos básicos pende ahora de un hilo, pero esta posibilidad nos sigue pareciendo más material de lo que el mercado está dispuesto a valorar», indica Moëc.
TIPOS RESERVA FEDERAL Y BCE
La desaceleración de las nóminas, el aumento del desempleo y la ralentización del crecimiento de los ingresos se unen a otros indicadores más amplios del mercado laboral, como la caída de las vacantes y el aumento de los recortes de empleo, que sugieren una relajación del mercado laboral», afirma el jefe de macro research de AXA IM, David Page. «El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, se había mostrado agresivo al hablar de la preocupación de que la economía pudiera estar recuperándose durante el verano y afirmó que Fed necesitaba pruebas de un debilitamiento continuado del mercado laboral para evitar otra subida.
«Los datos del mercado laboral de este mes han proporcionado esa evidencia y mantenemos nuestra opinión de que la Fed dejará los tipos sin cambios en su reunión de septiembre. Asimismo, esperamos que en los próximos meses se sigan observando signos de debilitamiento del mercado laboral y de la actividad, en particular por parte de los consumidores, tras la explosión de actividad registrada a principios de verano. En conjunto, creemos que esto disuadirá a la Reserva Federal de volver a endurecer su política monetaria en noviembre o más adelante, y seguimos considerando que el 5,50% es el nivel máximo del tipo de interés de los fondos federales», indica David Page.
Los datos del mercado laboral de este mes han proporcionado esa evidencia y mantenemos nuestra opinión de que la Fed dejará los tipos sin cambios en su reunión de septiembre
Según Darío García, de XTB, «a pesar de que algunos datos macroeconómicos como los datos de NFP de Estados Unidos apuntan a una posible nueva subida de tipos de interés el próximo día 20, estos están siendo considerados por el mercado como estacionales. Sin embargo, la tasa de desempleo conocida la semana pasada que se incrementó del 3,5% esperado al 3,8% finalmente publicado, refleja la efectividad del ciclo de alzas vivido desde 2022. En este contexto, no parece que, a pesar de depender de las publicaciones macro, los bancos centrales vayan a apostar por una nueva alza de tipos de interés.
ZONA DE CONTRACCIÓN EN LA EUROZONA
Los últimos datos conocidos, los PMI de servicios ya cotizan en zona de contracción económica de la eurozona y con cierto retraso siguen los datos de Manufactura. Esto alienta a que el BCE el próximo día 14 no subirá los tipos de interés. Pero existen diferencias.
Los últimos datos conocidos, los PMI de servicios ya cotizan en zona de contracción económica de la eurozona
Por parte del mercado de swaps de Estados Unidos, el FOMC no subirá los tipos de interés con una probabilidad del 95%, dejando la tasa de referencia en el rango de 5,25%-5,50%. Y no sólo eso, sino que en las siguientes reuniones, el mercado descuenta en la mayoría de los casos que ya no habrá más alzas de tipos de interés. Aunque el mercado de bonos sigue castigado y descuenta que podría haber una última a principios de 2024.
MERCADOS Y AXA IM
Por su parte, el director de inversiones de AXA IM Core y presidente del AXA IM Investment Institute, Chris Iggo, apunta que «la diferencia entre los rendimientos de los índices de bonos corporativos y los tipos de interés a un día no puede ser más estrecha». «Los tipos han subido y los diferenciales de crédito se han reducido en los últimos meses, con la minicrisis bancaria de marzo demostrando haber sido una gran oportunidad de compra». «Un aterrizaje suave, sin grandes dificultades empresariales y con la Reserva Federal manteniendo los tipos altos durante un periodo prolongado, podría significar que la brecha siga siendo muy estrecha».
«Sin embargo, un aterrizaje forzoso es un riesgo no desdeñable. Si los datos económicos se debilitan y, sobre todo, el mercado laboral estadounidense se ablanda, es probable que las primas de riesgo aumenten y las expectativas de tipos de interés para 2024 caigan». «Existen oportunidades para construir una posición de cobertura en caso de que el aterrizaje suave en el que nos encontramos ahora se convierta en algo que dificulte la gestión de los flujos de caja y los balances», señala.