El sexo es una de las actividades más placenteras y valoradas por mujeres y hombres. Mantener una actividad sexual saludable es muy beneficioso para el ser humano, tanto física como emocionalmente. Pero muchas veces no tenemos en cuenta el hecho de que a veces, en la búsqueda del orgasmo, podemos adoptar alguna postura que podría ocasionarnos daño más habitualmente de lo que creemos.
Estas lesiones pueden ir desde leves golpes o moratones hasta graves lesiones, como es el caso de la dolorosa fractura de pene. Por esta razón, varios estudios se han centrado en examinar qué posturas sexuales pueden a llegar a ser más peligrosas. Un ejemplo de ello es la encuesta que la marca de placer masculino Arcwave ha realizado entre más de 1.000 adultos sexualmente activos.
1Cuáles son las posturas más peligrosas y los percances más comunes
Ya sea en pareja, en forma de encuentros ocasionales o incluso en solitario, mantenerse sexualmente activo favorece que nuestro cuerpo libere endorfinas, un analgésico natural que bloquea el dolor y produce una profunda sensación de bienestar.
Pero no todo lo que tiene que ver con el sexo es siempre divertido y satisfactorio. Y es que, según apuntan los sexólogos, entre las posturas consideradas como más ‘habituales’ puede existir un gran riesgo de sufrir percances que nos lleven derechos a la sala de urgencias.
Pero, si tuviéramos que configurar un ranking de las posturas más arriesgadas a la hora de practicar sexo, ¿cuáles estarían en los primeros puestos? Según Arcwave hay una clara ganadora: ‘el perrito’ se posicionaría sobre todas las demás con un 42% de las lesiones registradas.
‘El misionero’ estaría en segundo lugar con un nada despreciable 36%, siendo únicamente un 10% el porcentaje de encuestados que aseguraban haber sufrido algún daño practicando ‘el 69’.
Pero este análisis realizado por Arcwave no sólo nos advierte de las posturas con las que tenemos más posibilidades de lesionarnos durante el sexo, sino que también posiciona a las mujeres como más propensas a sufrir daños que los varones, con un 47% ante un 33%. En cuanto a la edad, un 66% de los participantes que aseguraban haber tenido algún que otro contratiempo entre las sábanas tenían entre los 25 y 35 años.
Otros porcentajes a tener en cuenta nos dan a conocer las lesiones más frecuentes. Moratones y magulladuras estarían en primer lugar con un 33%. Las quemaduras producidas por roces con la alfombra y las infecciones del tracto urinario les siguen muy de cerca (31% y 29% respectivamente). Tirones musculares (25%) y desgarros vaginales (18%) serían los siguientes. Y por último encontraríamos las lesiones de espalda (13%) y las reacciones alérgicas (9%) como consecuencia de practicar sexo..