BNP Paribas es el mayor banco de Francia y el de mayor capitalización bursátil de la zona Euro, su valor en bolsa alcanza los 68 ml millones de euros muy por encima de sus competidores en su país como Credit Agricole o Societe Generale. El año pasado tuvo unos beneficios de 10.196 millones de euros, lo que supone un 7,5% más que en 2021.
Teniendo en cuenta sus números podría hacerse con cualquiera de los grandes bancos de nuestro país, ya sea Banco Santander, BBVA o Caixabank, puesto que son entidades de menor tamaño a nivel de capitalización en bolsa. Concretamente la entidad presidida por Ana Botín alcanza los 51.500 millones de euros, le sigue por detrás el banco con sede en Bilbao que se sitúa con 40.400 millones y por último cerrando el pódium, se encontraría el banco catalán con 27.400 millones de euros.
El hombre que dirige el banco francés, Jean-Laurent Bonnafe, tendría en mente la posibilidad de realizar una fusión importante con otro banco, ya se fuera o dentro de sus fronteras. Además ha construido un fondo remanente de 8.000 millones de euros para convertirlo en el banco corporativo y de inversión más grande de Europa. El director ejecutivo ha aprovechado los tropiezos de sus rivales y ha reducido los costes para lograr unas ganancias récord y tiene un amplio conocimiento sobre cómo lograr uniones transfronterizas que todos los ejecutivos bancarios dicen que deben ocurrir para competir con los gigantes estadounidenses.
Pero al enfrentarse a los accionistas en la gran sala de convenciones bajo el Museo del Louvre en París el mes pasado, Bonnafe resumió las probabilidades de que él hiciera tal acuerdo: «Cerca del cero absoluto». El director ejecutivo, reservado y meticuloso, conocería perfectamente los escollos para poder llevar una operación de tal envergadura. Ascendió en las filas de BNP hasta convertirse en su presidente en 2011, al integrar las grandes fusiones de sus predecesores.
La aversión de Bonnafe a una gran adquisición cierra el camino hacia un crecimiento orgánico en un momento en que los inversores parecen preparados para una adquisición bancaria europea, todo ello a pesar de ser el banco más rentable en Europa y las promesas de un crecimiento constante y más recompras. BNP Paribas ahora cotiza más de un 40% por debajo de su valor contable, un descuento mayor que el promedio de los principales bancos europeos, con sus acciones intercambiándose a 56 euros.
El FUTURO DEL BANCO BNP
«El plan de crecimiento de Bonnafe podría necesitar más claridad», dijo Jerome Legras , socio gerente de Axiom Alternative Investments. «Los próximos 18 meses son cruciales para el banco, ya que veremos si logran invertir los ingresos de la venta de Bank of the West en proyectos con mayor rentabilidad«. Legras dijo que no espera que Bonnafe haga un gran negocio, sino que siga diversificando y desarrollándose en mercados donde el banco pueda beneficiarse de las economías de escala, como los seguros.
Para ser justos, las acciones de los bancos europeos en general no han tenido un buen desempeño desde la crisis financiera, y el desempeño de BNP sigue siendo mejor que el de la mayoría de sus pares. Las acciones han subido un 91% desde que Bonnafe asumió el cargo en diciembre de 2011, en comparación con el 30% de su rival local Société Générale . Mientras en España, BBVA cotiza al mismo precio sus acciones que en 2011, por contra Banco Santander se encuentra un 55% menos que en aquellas fechas.
El resto de bancos europeos han seguido una línea parecida, Barclays cayó un 11% y Deutsche Bank perdió un 62% durante el período. Peor le fue a Credit Suisse, ya no existe como firma independiente y tuvo que ser absorbida por su homólogo suizo, UBS, debido a los problemas financieros que padecía y para evitar una nueva crisis bancaria.
Todos esos rivales sorprendieron repetidamente a los inversores con fuertes pérdidas en los últimos años. No así Bonnafe, quien registró una ganancia recurrente en todos los trimestres excepto en uno (en 2014, cuando aceptó una multa histórica de US 9.000 millones de dólares después de que el banco fuera sancionado por las autoridades de EE.UU.). Los analistas coinciden en que Bonnafe ha hecho un buen trabajo gestionando el riesgo y buscando la rentabilidad de la entidad de un modo eficiente.
«BNP ha estado evitando las minas terrestres que volaron a sus competidores«, asegura Matthew Clark, analista de Mediobanca. «Siguió generando ganancias consistentes en sus diversas franquicias, lo que le permitió acumular capital». Eso convirtió a BNP Paribas en una de las pocas entidades lo suficientemente fuertes como para aparecer como comprador cuando los rivales tuvieron que deshacerse de sus negocios.
«BNP es el último superviviente de la banca de inversión europea», defiende Clark. Puesto que tiene uno de los balances más grandes entre los bancos de Europa generando comparaciones con el gigante de Wall Street JPMorgan Chase & Co. banco corporativo y de inversión. Cuenta con amplias operaciones de banca comercial y minorista, desde Francia, Bélgica e Italia hasta China, donde se dirige a corporaciones y clientes con alto patrimonio. Su parte del negocio de seguros Cardif opera en más de 30 países de Europa, Asia y América Latina, generando 30.000 millones de euros en primas brutas emitidas el año pasado.
Sin embargo, si BNP es lo más cercano que tiene Europa a una competir con JP Morgan, su valoración en el mercado de valores está muy lejos. Con un capitalización aproximada de 66.000 millones de euros, vale menos de una quinta parte de lo que obtiene su rival estadounidense. Su relación precio-valor contable, de 0,6, está justo por debajo del promedio de 0,62 para el índice Stoxx 600 Banks.
«BNP es un banco bien administrado» con «un modelo de negocios diversificado que permite un crecimiento constante», dijo Flora Bocahut, analista de Jefferies Financial Group Inc. «Aún así, esto no se refleja en el precio de las acciones del banco. «
OPORTUNIDADES DE COMPRA
El deterioro de la economía mundial «va a crear oportunidades para aquellos bancos como BNP, que tienen la capacidad de asumir participación de mercado cuando los competidores se retiran, o incluso tomar partes o instituciones enteras a buen precio si fracasan», señaló David Knutson, director de inversiones de Schroders Plc.
La especulación sobre la necesidad de consolidación bancaria en Europa ha sido un tema recurrente desde la crisis financiera, pero los acuerdos reales han sido raros, particularmente las adquisiciones transfronterizas. Esto se debe a que la falta de un fondo de garantía de depósitos común y reglas de capital onerosas no los hicieron atractivos. Estos últimos se suavizaron el año pasado, un cambio que fue particularmente positivo para BNP.
Las consideraciones políticas siguen siendo un obstáculo importante. Cuando Credit Suisse se tambaleó al borde del abismo en marzo de este año, el gobierno suizo negoció rápidamente una solución nacional que hizo que cayera en los brazos de su rival UBS Group AG. BNP Paribas había estado explorando qué partes de Credit Suisse podrían ser compatibles para su negocio.
Bonnafe ha dejado en claro que planea usar una gran parte de los ingresos de la venta de Bank of the West para repartirlo entre sus accionistas, dejando alrededor de 7.600 millones de euros para adquisiciones e inversiones en negocios existentes. «BNP está subexpuesto en la gestión de activos, y hay razones para creer que el banco puede haber perdido oportunidades de crecimiento externo en ese espacio durante la última década», señaló Clark de Mediobanca.
LA SEDE DE BNP EN PARÍS
Pero los acuerdos no son una estrategia, por lo que Bonnafe por ahora permanece enfocado en lo que ha logrado con tanto éxito durante más de una década. Se ha fijado el objetivo de ahorrar 2.000 millones de euros adicionales hasta 2025. También está cediendo algunos de los edificios históricos del banco en el centro de París y trasladando personal a las afueras. Eso es después de que ya redujo las sucursales y trasladó las operaciones de back office a países como Portugal.