Cabify quiere que haya menos coches para que uses los suyos

Es un momento extraño para Cabify. El unicornio español está lidiando con una sentencia de Tribunal de Justicia de la Union Europea (TJUE) que puede transformar la regulación española y europea del servicio de las VTC, una campaña en su contra del sector Taxi, que tiene buenos motivos para mirarles con desconfianza, y con la necesidad de seguir creciendo para mantener ese por momentos tan evasivo concepto de rentabilidad en las aplicaciones.

En ese concepto su fundador y CEO de la empresa Juan de Antonio, tomo la tarima del Taleñt de este año. Lo llamativo es que aprovecho la oportunidad para señalar como uno de los rivales de su empresa no al taxi, ni a Uber o Bolt, sino más bien a los vehículos personales. «Yo he vivido en un pueblo pequeño y me resulta llamativo el espacio que todavía dedican las ciudades a los coches», aseguró en su intervención en el evento. 

Es llamativo, sobre todo para un modelo de empresas que en ciudades como San Francisco o Santiago de Chile se ha señalado por el efecto adverso que tiene, según los críticos, sobre el transporte público. Desde la empresa aseguran así de nuevo que su verdadero objetivo es que disminuyan los viajes en vehículos privados, asegurando, por tanto, que una de sus metas es disminuir la contaminación por usos del coche. 

Lo cierto es que también aprovecho para cargar en contra del Ministerio de Transporte Movilidad y Agenda Urbana y contra el Gobierno de Cataluña. «Hay instituciones que ayudan como el ministerio de economía, se crean leyes de movilidad sostenible y ley de apoyo a las Starups. Pero entonces nacen empresas como Cabify, un unicornio como los que buscamos, y llega el MITMA o el Govern y se cargan un poco el trabajo, empujados por metas cortoplacistas relacionadas con las elecciones que vengan», sentenció aunque sin nombrar medidas específicas.

Lo cierto es que la posición de señalar el vehículo privado como el principal enemigo de la aplicación parece una buena forma de manejar la opinión pública, después de meses de campaña en su contra por parte del taxi. Pero no deja de ser irónico que la solución de Cabify para generar menos contaminación de vehículos a motor sea que los usuarios usen los suyos.

CABIFY EN PLENO PROCESO DE DESCARBONIZACIÓN

A pesar de lo complicado que pueda parecer para una empresa cuya principal forma de ingreso es el uso de coches por ciudadanos al día a día es innegable el esfuerzo de la empresa en ser más sostenibles. Desde una campaña de electrificación hasta proyectos de sembrado de árboles para compensación carbónica poco a poco la empresa está apuntando por funcionar sin necesidad de enviar tantos gases invernadero a la atmosfera. 

Pero la realidad es que la empresa no es una excepción dentro del mundo de las VTC, con Uber y Bolt teniendo proyectos para acabar con las emisiones de carbono de sus servicios. Pero es que el caso de Cabify es especialmente ambicioso, que espera haber eliminado del todo su emisión de gases invernadero para 2030, mucho antes de las fechas de sus dos competidores, más cercanas de hecho a 2050. Lo cierto es que no es una mala estrategia, no solo por temas de sostenibilidad, sino por su negocio. 

Recordemos que se espera que en los próximos años Bruselas termine de aprobar su prohibición de venta de vehículos de combustión. Visto así tener una flota completamente electrificada, y promociones y planes pare atraer a usuarios que de otro modo estarían usando, y comprando, sus propios vehiculos, usen la aplicación española en vez de usar estos. 

EL FUTURO DEL TRANSPORTE SIGUE TRANSFORMÁNDOSE

No se trata solo del sector de los vehículos de conductor. Desde el mundo de los trenes y las aerolíneas se busca presentar sus servicios como más limpios que sus competidores, y siempre como más limpios que el transporte particular. Incluso las empresas de renting o carpooling han decidido que la sostenibilidad es uno de sus puntos de venta clave, lo que tiene sentido dado que no solo los usuarios, sino cada vez más instituciones gubernamentales lo exigen.

Por tanto, la decisión de Cabify de apuntar contra los vehiculos particulares puede ser vista como una tendencia. Al mismo tiempo si el objetivo real de estas medidas es que el transporte sea más sostenible más que cualquier VTC, incluso con una Flota electrificada es importante el cuidado del transporte público. Al mismo tiempo es una muestra de que el interés de un choque entre taxistas y VTC no viene precisamente de estas nuevas empresas de transporte.