Seguro que si no tienes una estantería llena de los míticos muñecos Funko conoces alguien que sí que la tenga, y es que estos muñecos cabezones llevan años llenando las listas de regalos cuando la imaginación llega a ser escasa. Aunque no es oro todo lo que reluce, ya que, como todos, la compañía a cargo de estas figuras está pasando por una mala situación, y lo peor de todo es que tiene una solución complicada.
1¿Qué son los muñecos Funko?
Estas figuras Funko llegaron al mundo después de que Mike Becke, diseñador gráfico de camisetas, junto a Rob Schwartz y Sean Wilkinson fundaran la empresa en un bar, y cuyo nombre anglosajón viene de la mezcla de las palabras ‘Fun’ (diversión) y Company (empresa), que derivó en la palabra que tantos reconocen hoy en día, Funko.
Como muchas otras grandes historias, todo comenzó en un garaje, realizando figuras de personajes reconocidos en su época como podría ser Popeye, aunque en un inicio no solo contaban con figuras, si no que también se encargaban de realizar huchas y diversos accesorios relacionados.
Todo ello hasta que en 2005 su dueño vendió la empresa a su amigo Brian Mariotti, que en la mítica Convención Internacional de Cómics de San Diego presentó estos muñecos por primera vez siendo cabezones con un estilo chibi que representaban a personajes conocidos del mundo de los cómics.
Así nació la línea Pop! hasta lo que conocemos hoy día, que ha arrasado en ventas llegando a mantener una popularidad muy por encima de alguna de su competencia más cercana.