La cerveza y la sidra son bebidas alcohólicas que día a día gana adeptos porque acompañan nuestra rica gastronomía y salidas de ocio. Asimismo, la ingesta habitual de alcohol resulta perjudicial para el organismo y también es necesario saber que mayoritariamente resultan un gran aporte calórico. Los ingredientes de la cerveza y la sidra son distintos, así como también la época o período de tiempo en que se originaron. Por ello, te vamos a explicar cuál de las dos bebidas alcohólicas engorda más, para que puedas hacer un consumo inteligente, sobre todo si estás en algún tipo de dieta.
Cómo se realiza la sidra
La sidra es una bebida con alcohol pero de baja graduación, y se elabora a partir del zumo fermentado de la manzana, que es en definitiva lo que le aporta ese sabor característico, entremezclándose tonos amargos con ácidos y finalmente dulces. Una botella de sidra requiere de 10 a 12 manzanas para su producción. La sidra no tiene alcohol añadido, el poco que contiene es el resultado de la fermentación alcohólica que ocurre en el proceso de fabricación. Este proceso natural lo realiza la levadura presente en las manzanas y que transforma sus azúcares del mosto en alcohol y gas carbónico.
