UBS se mete en un problema de 533.000 M€ tras comprar Credit Suisse

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La compra de UBS sobre Credit Suisse deja aún numerosas incógnitas y algunas luces. La Unión de Bancos Suizos abonará una acción propia por cada 25 de Credit Suisse, un precio de unos 75 céntimos de franco suizo y una quita cercana al 60%. El segundo mayor banco del país helvético desaparece del mapa y se procederá a una fuerte reestructuración, especialmente en el área de inversión, fuente de la grave situación que ha terminado con 167 años de historia.

UBS abonará un total de unos 3.000 millones de euros, tendrá una línea de liquidez de unos 93.000 millones (100.000 millones de dólares) y el apoyo del banco nacional en caso necesario. Asimismo, se ha protegido frente a multas y costes por litigios derivados de la compra, que asumirá el organismo nacional llegado el caso.

Los bonos de Credit Suisse por valor de 17.000 millones de dólares tienen ahora un valor cero

Sin embargo, la adquisición arroja numerosas dudas. Los bonos de Credit Suisse por valor de 17.000 millones de dólares tienen ahora un valor cero, mientras que existen otros 533.000 millones de euros en activos dudosos o incobrables, un montante estratosférico y que supone la mitad del balance de UBS antes de la operación.

EL BALANCE DE UBS, UN 56% RESPECTO A LA FED

Tras la compra, UBS habría incrementado su balance hasta los 5 billones de dólares, un nivel que supone el 58% del balance de la mismísima Reserva Federal, y los comentarios al respecto no se han hecho esperar. «Si las quiebras de entidades regionales en EE UU continúan, el balance de UBS superará al de la Reserva Federal», han sostenido desde el conocido blog Zerohedge.

Y es que, el montante pagado por la compra equivale al 4% del valor contable y apenas el 10% del valor de mercado de Credit Suisse a principios de año. No obstante, en el momento de efectuarse la transacción, el precio abonado era un 60% inferior a la capitalización del banco quebrado. Credit Suisse, que no ha sido suspendida de cotización, se ha dejado un 60% en la Bolsa suiza, mientras UBS se hunde cerca de un 10%. Los seguros de riesgo ante impago –credit default swaps– se han disparado en la compradora a niveles cercanos a la crisis de deuda y por encima de los precios marcados con la irrupción de la pandemia.

Credit Suisse pone fin a 167 años de historia
Credit Suisse pone fin a 167 años de historia

Y es que, el mercado no está conforme con la operación. La pregunta es cuántos bancos están en la misma situación que Credit Suisse y es inevitable que se repitan los mismos nombres que en la crisis de 2008, con Deutsche Bank y Barclays en la cabeza, con caídas cercanas al 4%. El efecto contagio es el riesgo ahora a tener en cuenta, más cuando la Reserva Federal de EE UU ha emplazado al resto de bancos centrales a realizar una acción coordinada para mantener la liquidez en dólares a toda costa. Este es el principal temor del mercado: secarse.

EL MIEDO ENTRA EN LA FED: SECAR EL MERCADO

Pese a las ingentes cantidades de liquidez que han demostrado tener los bancos durante las presentaciones de resultados de este pasado año, la realidad es que las continuas subidas de los tipos de interés, así como las restricciones de la Reserva Federal y otros organismos centrales han dañado la situación financiera a costa de combatir la inflación, una batalla que se está ganando a duras penas, tal y como muestran los datos del índice de precios al consumo en la Eurozona y EE UU, donde las subyacentes prosiguen en máximos históricos.

Según los últimos datos, el balance de Credit Suisse duplica al de Lehman Brothers, el banco que quebró sin ayuda pública en 2008 y desató el mayor desastre financiero desde la Gran Depresión de 1929. Decenas de bancos quebraron por su elevada exposición a los activos tóxicos, otros desaparecieron, mientras los bancos centrales inyectaron billones de dólares en el mercado para sostener la exposición a la deuda. Cuatro años después, esa misma liquidez se facilitó a los países para evitar su quiebra, como Grecia, España, Irlanda o Portugal.

Algunas voces comparan la situación actual a la de entonces. «Sólo es el inicio de un mercado bajista y de nueva crisis financiera», afirman. Otros economistas y analistas creen que el mercado está capitulando y se tocará suelo. Nadie tiene una bola de cristal para adivinar el futuro, pero los movimientos serían similares al inicio de la crisis de 2007, con quiebras en entidades que apenas se conocían en Europa.

CREDIT SUISSE, EL DOBLE QUE LEHMAN BROTHERS

Cabe destacar que en los primeros coletazos de hace 15 años se tuvieron que rescatar firmas como Freddie Mac y Fanny Mae antes que Lehman Brothers. En Reino Unido, el colapso de Northern Rock provocó fuertes turbulencias, y aseguradoras, como AIG, recibieron miles de millones. En España, de más de 50 entidades financieras apenas quedaron una quincena de bancos.

Por el momento, para la quiebra de Silicon Valley Bank, Signature y First Bank se han inyectado cerca de 85.000 millones de dólares, superando el montante obtenido por AIG en su día. En Europa, se han facilitado por ahora 100.000 millones de liquidez para Credit Suisse ante la masiva petición de reembolsos.

Para UBS, la transacción limita su exposición, aunque el mercado no lo cree así al considerar que es una mala decisión. Analistas consultados por este medio han señalado, por su parte, que las caídas serían aún mayores si no se hubiera procedido a la compra. En cuanto a los principales perdedores, el Saudi National Bank, Qatar y BlackRock han perdido conjuntamente cerca 1.800 millones de euros al ser los principales accionistas.

Álvaro J. Medina
Álvaro J. Medina
Madrileño en Barcelona. Apasionado de la actualidad política, la Economía y empresas. He pasado por el grupo Intereconomía y Vozpópuli. Ahora, en MERCA2.es, INVERSIÓN.es y MONCLOA.com para seguir informando. "Si no lo puedes explicar, es que no lo sabes". Si tienes algo que contarme: alvaro.medina@merca2.es