San Sebastián, la última ciudad en limitar las licencias de alojamientos turísticos

Que lo de la ‘Ciudad sin Ley’ es en Estados Unidos, porque aquí, en Europa, las ciudades son cada vez más cerradas legislativamente hablando. Y ya si nos referimos a lo que atañe al precio de los alquileres, el turismo y los alojamientos vacacionales mucho más. Aunque, en este caso, la localidad vasca de San Sebastián ha ido en contra de los hoteles, aunque también de las VUT.

Y esque la capital de Vizcaya se ha unido a la ya larga lista de ciudades que han comenzado a regular y publicar nuevas normativas en relación con cualquier actividad referente a distintos tipos de alojamiento. Si la comunidad balear ya hizo lo propio con las viviendas de uso turístico, Barcelona con los pisos ilegales de alquiler vacaciones y el país vecino, Portugal, en cuanto a las inversiones de extranjeros, ahora es el turno de San Sebastián .

El Ayuntamiento de San Sebastián quiere poner freno al aumento del turismo en la ciudad

Así, Donostia ya ha adelantado que durante este 2023 va a suspender la concesión de nuevas licencias a nuevos alojamientos turísticos, ya sean hoteles, alojamiento de menor categoría o pisos de alquiler vacacional. Toda una declaración de intenciones siendo una de las ciudades con más turismo local del país y sobre todo en épocas estivales, debido a sus conocidas playas, como la de La Concha y Ondarreta.

La decisión, además, ha estado motivada por el incremento del turismo en los últimos meses, que supera incluso a los datos previos a la pandemia de 2020. Así, San Sebastián alberga ahora un 40% más de plazas de alojamiento turístico que hace solo 6 años, lo que ha provocado un turismo casi masivo de cerca de 863.000 visitantes anuales.

MEDIDAS ANTITURISMO EN SAN SEBASTIÁN

Al igual que otras muchas regiones, no sólo españolas sino mundiales, el País Vasco lleva años experimentando una tendencia alcista en cuanto al turismo se refiere. Una constante que, en el caso de San Sebastián, ha superado en 2022 incluso datos de antes de la crisis sanitaria de la COVID-19.

Como consecuencia, los precios de la vivienda, y especialmente de los contratos de alquiler ha aumentado de manera importante, y por eso el Ayuntamiento de San Sebastián ha decidido poner freno.

Con todo, el consistorio vasco no concederá más licencias de alojamientos turísticos ni a hoteles ni a VUT, al menos hasta finalizar el presente año, cuando se espera poder aprobar el nuevo Plan General de Ordenación Urbana. Aún así, la nueva medida tan solo estará vigente para las zonas más tensionadas de la ciudad, pudiendo abrir nuevos hoteles en otras áreas más desocupadas. Esto significa que los barrios afectados son  Antiguo-Ondarreta, Ategorrieta-Ulia, Centro, Gros e Ibaeta.

“La oferta de alojamientos es suficiente y es el momento de limitar la apertura de nuevos negocios”.

Por todo, el alcalde de la ciudad, Eneko Goia, reconoce la tensión hotelera de la ciudad y alega que “la oferta de alojamientos es suficiente y es el momento de limitar la apertura de nuevos negocios”.

Y en parte suena razonable. La capital vizcaína cuenta con más de 160 hoteles, unas 1.350 viviendas y pisos de uso turístico, o alquiler vacacional temporal, lo que suma un total de casi 18.000 plazas, cifras solo al alcance de las grandes ciudades españolas. Es importante destacar el ‘boom’ turístico que ha sufrido en los últimos años el País Vasco, y no solo San Sebastián, sino también otras localidades como Bilbao y Vitoria-Gasteiz.

NUEVO PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN URBANA

Aunque la medida se suma a otras similares ya aplicadas en ciudades como Palma, Madrid y Barcelona, la nueva legislación del Ayuntamiento de San Sebastián no será eterna. De momento tendrá una duración de un año, aplicable otro más, hasta que el consistorio aprueba definitivamente el nuevo Plan General de Ordenación Urbana, pendiente aún de su ratificación.

El barrio de Parte Vieja está fuera de la prohibición ya que es zona saturada de alojamientos turísticos

Así, la normativa no incluye la zona de la Parte Vieja de la ciudad, ya que esta área ya fue declarada hace años como ‘zona saturada de alojamientos turísticos’. La prohibición estará vigente tanto para parcelas de uso residencial como de uso terciario, aunque estas últimas podrán realizar la actividad turísticas si se encuentran fuera de las zonas tensionadas.
No obstante, “la suspensión excluye a usos como los cámpings, agroturismos y casas rurales, por estar enclavados en suelo no urbanizable”.