La locura de alquilar una habitación en Madrid

Durante el pasado año 2022, compartir una vivienda en España costó un 20,5% más que en 2021. Una cifra que alcanza los 440 euros por habitación de media. Así, Madrid fue la comunidad donde más se notó el incremento, con una subida de casi el 70%, y tan solo por detrás de Cataluña (+73,8).

Según el último estudio publicado por el portal inmobiliario Fotocasa, ‘Viviendas compartidas en España en 2022’, el precio de una habitación en vivienda compartida es más caro que nunca, en concreto un 20,5% durante el pasado 2022, lo cual además supuso un incremento del 66% respecto a 2015, cuando la cuota era de 265 euros.

«La subida en 2022 ha sido superior a 75 euros, frente a la media de 364 euros de 2021»

María Matos, portavoz de la entidad inmobiliaria, indica que la gran mayoría de los inquilinos en 2022 eran jóvenes de entre 18 y 35 años y que «estos ya no lo hicieron tanto para socializar sino porque lo necesitaban para repartir gastos.»

El portal inmobiliario ha estimado que el esfuerzo salarial al que tienen que hacer frente los inquilinos de habitaciones en viviendas compartidas ya supera el 50% en las ciudades con precios más tensionados, por lo que no es de extrañar que la subida haya sido superior a 75 euros en 2022, frente a la media de 364 euros de 2021.

MADRID ES LA SEGUNDA CIUDAD MÁS CARA

La coyuntura económica ha provocado un enfriamiento en el mercado residencial de compraventa de viviendas. La continua subida de tipos de interés también ha supuesto un descenso en la firma de nuevas hipotecas y un endurecimiento de las condiciones. Así, el alquiler es ahora el rey del mercado. 

En Madrid, el precio de las rentas de alquiler continúa subiendo y la locura de acceder a una vivienda se extiende a la hora de compartir piso y alquilar solo una habitación. Así, la Comunidad de Madrid fue la comunidad donde más se notó el incremento, con una subida de casi el 70%, y tan solo por detrás de Cataluña (+73,8).

En la línea, el precio del alquiler de una habitación en una vivienda compartida se ha incrementado más de un 10% en los últimos siete años en todas las comunidades españolas, siendo Cataluña (+73,8%), Madrid (+68,7%) y la Comunidad Valenciana (+57,8%) las regiones con mayores subidas.

Aragón, con un incremento del precio medio del 49,9%, Andalucía (+41%) y Galicia (+40,2%) fueron las siguientes en el ranking, mientras que Castilla-La Mancha (+20,7%) y la Región de Murcia (+20,2%) cerraron la clasificación.

Getafe, con un 44% más, Madrid capital (+34%) y L’Hospitalet de Llobregat (+31%) fueron las ciudades que registraron el mayor incremento desde 2015.

En lo relativo a los precios, Cataluña, con 545 euros mensuales, Madrid (503 euros al mes) y el País Vasco (420 euros al mes) fueron las tres comunidades con un alquiler medio de la habitación superior a los 500 euros mensuales en 2022.

De nuevo, la Región de Murcia (264 euros al mes) y Castilla-La Mancha (245 euros al mes) fueron las regiones más económicas.

CRISIS DE LA VIVIENDA

Según Martos, el aumento de inquilinos de habitaciones en pisos compartido se deben a componente económico: «La imposición de tener que compartir vivienda causa estragos en el desarrollo de los núcleos familiares, al privar de intimidad a las personas, por lo que esta coyuntura podría incluso influir en las tasas de natalidad», ha añadido la portavoz.

Además, el precio medio de la vivienda nueva y usada aumentó un 0,3% en enero respecto al mes anterior y moderó su crecimiento interanual hasta el 6,9%, su menor tasa desde marzo de 2022, según el índice IMIE de Tinsa.

«Los últimos datos de inflación y PIB han mejorado las perspectivas macroeconómicas y hacen esperar una moderación de las subidas de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo a medida que avance el año. Aun así, se anticipa que el coste de las hipotecas continuará incrementándose en 2023″, señala Cristina Arias, directora del Servicio de Estudios de Tinsa.

Elena García
Elena García
Periodista especializada en contenido económico, de finanzas e inmobiliario.