El último truco de las aerolíneas: Vueling vende billetes de avión que no existen

Comprar un billete de avión no es garantía de poder coger el vuelo deseado –y contratado– ya que existen formas legales que emplean las aerolíneas para garantizar un pasaje mínimo que haga rentables los vuelos. La tradicional y poco ética práctica del overbooking no es la única forma de quedarse en tierra, ya que en ocasiones ni siquiera el asiento concreto asignado por la aerolínea existe en el avión encargado de realizar el vuelo. Es el caso de Vueling, compañía que realizó esta práctica la pasada Navidad según denuncia Alex Fuste, economista jefe de Andbank y víctima de los hechos.

LA «ESTAFA» DE VUELING

El propio Fuste publicó en sus redes sociales varios mensajes por lo que considera un atropello a sus derechos como pasajero y una “estafa”, ya que realizó el check-in seis días antes de la fecha concreta del vuelo, logrando su tarjeta de embarque y la asignación del asiento. Dado que en estas fechas quería garantizarse llegar a su destino para pasar el fin de año, el economista jefe de Andbank logró el asiento 34A.

El afectado llegó con tres horas de antelación al aeropuerto de Berlín, pero cuando llegó a la ventanilla le dijeron que había overbooking

El afectado llegó con tres horas de antelación al aeropuerto de Berlín –del que partía su vuelo–, pero cuando llegó a la ventanilla le dijeron que había overbooking, ante lo cual enseñó la tarjeta de embarque con el asiento asignado. Cuál fue su sorpresa cuando la persona que le atendía le indicó que el avión no tenía fila 34, es decir, que su asiento no existía. Tras poner la reclamación oportuna a través de la página web de Vueling, Fuste dejó claro que no descartaba acudir a la vía judicial.

Vueling
Mensaje de Alex Fuste en Twitter.

La oferta de Vueling fue abonar una indemnización de 250 euros, que es lo que establece la normativa para el caso de pasajeros afectados por overbooking cuyo trayecto no supere la distancia de 1.500 kilómetros. Da la causalidad que entre Berlín y Barcelona –ciudad a la que volaba Fuste– hay 1499 kilómetros. 

LAS UVAS EN EL AVIÓN

Además del dinero, Vueling le ofreció un billete en un vuelo para el día 31 de diciembre a las 22:00 de la noche, pasando el fin de año en el avión. Rechazó la propuesta y buscó pasajes para volar con otra compañía, según explicó en su cuenta de Twitter.

«Cuando una compañía te trata como a un bobo, los valores de la compañía quedan al descubierto. Me he pasado mi vida profesional acompañando los valores de la empresa para la que trabajo a los estándares más altos. Por eso me enerva ver que esta gentuza de Vueling hace esto», tuiteó visiblemente indignado el economista jefe de Andbank.

Como señala a MERCA2 la portavoz de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Ileana Izverneeanu, «la clave está en determinar hasta qué punto esto es una práctica recurrente o se trata de un hecho puntual», por lo que «desde la OCU vamos a estar muy atentos no sólo a las prácticas de Vueling, sino del resto de aerolíneas».

EN LA DIANA DE LAS RECLAMACIONES

La OCU lleva años reclamando un cambio en la regulación para prohibir a las aerolíneas la práctica del overbooking –que supone la venta de un mismo billete a dos personas–, pero en esta caso lo sucedido con Fuste va más allá. La portavoz de la institución recuerda a este diario que Vueling es una de las compañías por las que recibe más reclamaciones y anima a los afectados por los atropellos de las aerolíneas a reclamar para hacer valer sus derechos.

Otras fuentes del sector explican que durante la etapa inmediatamente posterior a la eliminación de las restricciones impuestas por la pandemia, hubo compañías aéreas que realizaban otra práctica irregular, aunque ha pasado desapercibida para los pasajeros afectados: cancelar vuelos para garantizar la ocupación.

«Como muchos de los aviones no se llenaban porque todavía la demanda no se había recuperado, las operadoras anulaban vuelos sobre la marcha, sin explicarles a los clientes la razón de la anulación y ofreciéndoles ir en el siguiente vuelo. Así se garantizaban que los aviones iban más llenos«, señalan las fuentes consultadas.

Este diario se ha puesto en contacto en varias ocasiones con Vueling para que aportara su visión de lo sucedido con Fuste, pero no ha recibido respuesta alguna.

Pese a estos problemas, Vueling sigue siendo una de las aerolíneas que mejor se ha recuperado tras la pandemia

A pesar de todos estos problemas, Vueling sigue siendo una de las aerolíneas que mejor se ha recuperado tras la pandemia, ocupando el segundo lugar en volumen de pasajeros detrás de Ryanair, otra empresa con un largo historial de reclamaciones. Junto con Iberia, estas tres empresas son las que registran un mayor tráfico aéreo al cierre de 2022, seguidas por easiJet y Air Europa.