La subida de tipos vuelve a comprometer la salud del Grupo Prisa 

Prisa lanzará una oferta pública de suscripción, con derecho preferente de los accionistas, de obligaciones subordinadas necesariamente convertibles en acciones de nueva emisión, tal y como la influyente compañía educativo-mediática ha comunicado a la Comisión Nacional de Mercados de Valores (CNMV).

El consejo de administración del grupo presidido por Joseph Oughourlian ha tomado por unanimidad la decisión de acometer esta ‘ampliación de capital en diferido’ que, previsiblemente, será seguida por los principales accionistas de la editora de la Cadena SER y El País.

El consejo de administración ha tomado por unanimidad la decisión de acometer esta ‘ampliación de capital en diferido’

Con este movimiento Prisa explica que busca «obtener los fondos necesarios para cancelar parcialmente y de forma anticipada el tramo junior de la deuda financiera sindicada del Grupo Prisa, que se encuentra referenciado a euríbor+8%, reduciendo el coste financiero asociado a la misma». 

Este paquete ‘tóxico’, que engloba alrededor de 185 de los 915 millones que resulta la deuda del multimedia después de haber recomprado el 20% de su filial radiofónica al Grupo Godó, amenazaban con comprometer la viabilidad del grupo en 2023.

En Prisa intentan ahuyentar a la cefalea cronificada que le provoca su deuda, y una depreciación bursátil que superará el 40% en 2022, mediante la generación de sensaciones positivas en el ámbito digital, pese a que parte de este no se traduce todavía en negocio relevante.

El País ha superado los 250.000 suscriptores digitales, gracias a una agresiva estrategia de ofertas low cost, y el podcast ‘Hoy El País’ promedia unos prometedores 75.000 oyentes diarios en apenas diez meses de vida. Pero ni paywall ni podcast parecen tener consistencia como apagar a corto plazo el fuego económico-financiero del grupo.

RUMORES DE FUSIÓN ENTRE PRISA Y OTROS GRUPOS

La delicada salud económica de Prisa le podría invitar a buscar inversores después de que Vivendi haya descartado elevar su participación en el editor de la Cadena SER y El País desde el 9,9% actual hasta el 29,9% tras no obtener el beneplácito de La Moncloa.

Uno de los que sonaba en las quinielas con más fuerza es Mediaset, en cuyo accionariado ha irrumpido Joseph Oughourlian. El grupo audiovisual hispanoitaliano buscaría sinergias publicitarias con el objetivo de complementar sus televisiones con las radios y prensa escrita de Prisa.

En las últimas semanas también aparece con fuerza el nombre de Atresmedia, que según las hipótesis que circulan por los mentideros de la Villa y Corte andaría deseosa de armar un mastodonte informativo que podría ser tumbado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia.

Prisa quiere ahuyentar los rumores de fusión

Prisa quiere ahuyentar los rumores de fusión a pesar de que algunas voces pronostican que, visto el incierto horizonte político y económico, este momento sería el propicio para que Oughourlian intente recuperar los más de 300 millones de euros que ha invertido en el grupo editor más influyente de España desde 1976. 

LA MONTAÑA RUSA DE PRISA

Alardeaba Prisa por haber domado su deuda, pero esta se volvió a elevar en 2021 y va camino de volver a hacerlo en el presente ejercicio. El grupo editor de la Cadena SER y El País todavía sufre los efectos de la dura resaca de 2006.

El multimedia decidió aquel año lanzar una OPA sobre Sogecable con la que disparó una deuda que parecía asumible (751 millones en 2005) hasta convertirla en peligrosa (2.710 en 2006). La crisis de las hipotecas subprime le estalló en la cara a Juan Luis Cebrián, que vio como el grupo mediático más influyente de España en los últimos cuarenta años se asomaba a la causa de disolución al tener unas deudas contraídas superiores a los 5.000 millones. 

Ampliaciones de capital, una reducción de casi 600 millones en 2020 para salir e la causa de disolución porque su patrimonio neto era inferior a las dos terceras partes de la cifra del capital social, y la venta de activos como Cuatro, Digital+ o Santillana (por más de 2.000 millones), han mantenido con vida al conglomerado mediático. Eso sí, la depreciación del mismo es de aúpa: la acción de Prisa cayó un 99,6% entre 2000 y 2017.

Al menos, Oughourlian ha atado una mayoría estable gracias a su fondo Amber Capital, la luxemburguesa Oviedo Holdings, sus amigos franceses de Vivendi y Global Alconaba que lidera Andrés Varela Entrecanales, dueño de una de las productoras encargadas de realizar la nueva docuserie sobre La Moncloa.