Ana Rosa Quintana aparecía la mañana del martes 20 de diciembre rodeada de un halo de misterio, dejando entrever de forma sutil que algo estaba a punto de ocurrir. Enseguida llamó la atención de los espectadores con su elegante traje de chaqueta color rojo satén. Sin embargo, la sorpresa vino cuando la presentadora del magacín, que lleva su propio nombre, abandonaba el plató de manera bastante repentina, antes de que concluyese la emisión.
7EL DISCURSO DE AGRADECIMIENTO
Tras recibir el premio, Ana Rosa quiso dar un pequeño discurso de agradecimiento y motivación para otras mujeres que están tratando de abrirse camino en un mercado competitivo y complicado. «Hoy es un día maravilloso para las mujeres”, dijo al subir al escenario. «Antes había que hacer muchas renuncias. Llevo toda la vida trabajando, 40 años en el periodismo, y se puede trabajar, tener una vida personal y una familia. No renunciéis a ningún sueño”, expresó con optimismo. También habló sobre el techo de cristal y alentó a las mujeres a apoyarse a las unas a las otras. La periodista también hizo referencia a los meses difíciles que ha tenido que vivir y a lo incierto que es el futuro. “Lo que tenga que venir vendrá, pero mientras tanto, disfrutemos lo que tenemos”, decía con emotividad.
