Las principales constructoras españolas llevan varios años diversificando su negocio para no depender únicamente del sector de la construcción. De esta forma, ACS, Ferrovial y Acciona están dando un giro hacia las renovables, plantas de tratamiento de agua y concesiones de autopistas, ya que reportan ingresos más estables y previsibles.
La construcción se ha visto perjudicaba durante los últimos meses por el incremente del precio de las materias primas así como por los problemas en la cadena de suministros, lo que deriva en menos márgenes de beneficios y retrasos en las obras.
ACS, Ferrovial y Acciona son firmas punteras a nivel global y ya hace mucho tiempo que tienen la mayor parte de sus negocios fuera de nuestro país. Se han beneficiado y están sumando numerosos contratos en Estados Unidos y Australia por la situación económica que viven ambos territorios. Esta estrategia, que han ido tejiendo las constructoras de seguir generando pedidos y deshacerse de grandes proyectos prescindibles las ha dotado de un escudo cada vez más infranqueable ante una posible recesión y de cara a los complicados meses que se auguran para final del año. Asimismo, podrán utilizar los grandes ingresos que esperan reportar para la inversión en el desarrollo de esos proyectos renovables, plantas de tratamiento de agua, y concesiones de autopistas.
Sin embargo, estas compañías tienen un componente cíclico, por lo que según los analistas de XTB consultados por Merca2.es, «su evolución dependerá de las perspectivas de crecimiento de la economía a nivel global en los últimos meses.
ACS, escudo infranqueable
ACS, la empresa presidida por Florentino Pérez, aún pierde en el acumulado anual, en el que se deja 6,39% desde enero. La cotización de Ferrovial también ha lastrado a la compañía en estos seis meses y se deja en el parqué bursátil un 10,35%. La compañia de Entrecanales, Acciona, es la que mejor se ha desenvuelto en bolsa y ya se revaloriza un 13,07% este 2022. La mayor caída se dio en junio debido a la galopante inflación y a la subida de tipos de interés por parte de los bancos centrales. Además, hay que añadir la multa por parte de la CNMC con 203,6 millones a las principales constructoras (ACS, Ferrovial, Acciona, Sacyr, OHLA y Grupo San José), por alterar durante más de 25 años el proceso competitivo en las licitaciones de construcción de infraestructuras. Sin embargo, esta información no supuso un impacto negativo en sus cotizaciones.
las constructoras han ido tejiendo una estrategia que sirva de escudo ante una posible recesión
ACS está sumando numerosos contratos en Australia a través de su filial CIMIC y su subsidiaria Thiess. En Estados Unidos opera con filiales como Turner, Dragados o Flatiron. En junio, contaba con una cartera de obra de 66.666 a nivel internacional, siendo Norteamérica y Australia los mercados más importantes. España solo representa un 4,8% de las ventas. Se trata de mercados que están engordando la cartera de pedidos de una ACS que, gracias a las desinversiones que ha ido realizando en los últimos meses, se está protegiendo ante las consecuencias a una posible recesión. Con la venta a Vinci de su negocio de energía, ACS ha cerrado su escisión del segmento de Servicios Industriales y se ha embolsado 4.900 millones de euros más una plusvalía de 2.900 millones de euros.
Asimismo, la compañía también ha realizado una venta en Alemania. Se trata de la participación del 49% de la autopista A7 entre Hamburgo y Neumunster por parte de Hochtief, de la que ACS es accionista mayoritario. La venta se ha realizado al fondo BBGI Global Infraestructure. El proyecto en su momento alcanzó una inversión de 600 millones de euros, tal y como informó el medio El Economista.
Acciona, ventaja en renovables
Ferrovial cuenta con una consolidada experiencia en el mercado australiano, en el que lleva presente cerca de 20 años. La división de Construcción opera en el país de forma permanente desde 2011. Recientemente, se ha adjudicado el tramo central de la línea Sydney Metro West, en Nueva Gales del Sur por 1.240 millones de dólares.
En Estados Unidos, la compañía opera principalmente a través de su filial Webber. Su última adquisición más sonada es la participación en el consorcio de la Nueva Terminal 1 del Aeropuerto JFK. Asimismo, la empresa de Rafael del Pino ha estudiado la venta de su participación en el aeropuerto de Heathrow.
Acciona tiene ventaja en cuanto al giro que están dando las constructoras hacia las renovables para diversificar sus carteras. Es, sin duda, líder mundial en promoción, producción y gestión de energías renovables, agua e infraestructuras. Es un grupo que se centra en la búsqueda de altas rentabilidades y entornos regulatorios estables para sus inversiones.
Acciona opera en Norteamérica desde el año 2000. Este año ha acelerado su crecimiento en Estados Unidos con la compra del proyecto Red-Tailed Hawk. Se trata de la construcción de la mayor planta fotovoltaica de la compañía que comenzará en el tercer trimestre de 2022. Supondrá una inversión estimada de 407 millones de euros. A través de su filial Acciona Energía en el día de ayer firmó un acuerdo de compraventa de energía en Australia para suministrar energía renovable a Barwon Renewable durante 10 años.