Cataluña recupera niveles previos a la pandemia en cuanto al alojamiento de viajeros y turistas se refiere, con un alto grado de ocupación, más del 72%, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) correspondientes a julio. No obstante, el cartel de completo se ha registrado en las zonas más turísticas, incluyendo Barcelona, la Costa Brava y Costa Dorada, según han apuntado fuentes del sector a MERCA2. La ocupación en Cataluña ha sido la quinta más alta de España, superada por Baleares, Canarias, País Vasco y Valencia.
Ninguno de los hoteles entre una búsqueda por días ofrece un precio inferior a los 150 euros para estas próximas fechas
Los viajeros en Cataluña se han alojado en los hoteles durante tres noches de media durante este pasado mes de julio, con un total de 2,47 millones de personas y más de 7,86 millones de pernoctaciones, para un parque total de 329.920 plazas. A pesar de la recuperación respecto al 2021, año en el que se registraron la mitad de pernoctaciones y apenas 1,4 millones de turistas, las cifras están alejadas respecto a 2019, con una caída de casi 300.000 noches menos, un 3,6% inferior. Asimismo, los viajeros se han incrementado en un 1%. Este incremento de turistas junto con la reducción de noches hoteleras se explica por los elevados precios de las habitaciones, que se han disparado de media cerca de un 25% en el último año y un 17% respecto al 2019.
LOS HOTELES POR MENOS DE 150 €, CASI EXTINGUIDOS
Algunos de ellos, como el Palace, registran precios de récord, hasta los 430 euros por habitación sencilla y noche, hasta más de 600 dependiendo de las dependencias y número de personas. En comparación con el pasado año, la subida se acerca al 15%, y muy por encima de los precios de 2019. Asimismo, este último fin de semana de agosto es una muestra de ello. La mejor oferta de Booking alcanza casi los 600 euros. En el Vincci, los precios suben a 235 euros.
Ninguno de los hoteles entre una búsqueda por días ofrece un precio inferior a los 150 euros para estas próximas fechas, teniendo en cuenta que el 85% de la oferta en esta conocida web está ocupada, un cartel de completo que se esperaba para la temporada pasada y que se ha materializado en esta. Otros establecimientos han registrado importantes subidas debido a la gran demanda de turismo nacional y extranjero existente, todo pese a la más que posible recesión que se espera entre invierno y primavera del próximo año en España.
Hace tres años, el precio medio de los hoteles en Cataluña alcanzaba los 102 euros por noche, un nivel que sube a los 142,38 euros en Cataluña, un 29% más en este pasado mes de julio respecto al mismo mes de 2021, si bien, a este precio es complicado encontrar una habitación a este nivel, tal y como se puede ver en una búsqueda rápida. Durante este mes de julio, Cataluña se ha convertido en un referente turístico en cuanto al destino se refiere, acaparando el 15% del total de las estancias de los nacionales y del 20,4% de los turistas extranjeros. Todo ello para incrementar los precios en ese 25%.
BARCELONA, PODER DE ATRACCIÓN TURÍSTICA
Pese a este incremento, Cataluña no es la Comunidad Autónoma donde más subieron. Navarra y Madrid se alzan con este galardón, con incrementos del 32,4% y 30,7%, respectivamente. Pese a esta fuerte subida, la ocupación fue de casi tres puntos por encima de la media española, en el 69,9%. Según el INE, Barcelona fue uno de los puntos turísticos con más pernoctaciones, junto a Calvià y Madrid, con una ocupación superior a la media de Cataluña, en el 78,29% y del 81,14% en fin de semana.
La Ciudad Condal albergó a 143.965 turistas nacionales y 668.627 extranjeros, que dieron lugar a 293.159 y 1,9 millones de pernoctaciones, respectivamente. En la Costa Brava, el número de turistas alcanzó los 212.640; seguido de la Costa Dorada (Tarragona), con 259.681; y la de Barcelona, con 176.187 pernoctaciones, teniendo en cuenta la zona de Sitges y Maresme.
En el sector esperaban un mes de julio, con unas expectativas que se han cumplido con creces, pese a las trabas del Ayuntamiento a la llegada de turistas, como pretende hacer ahora con los cruceros. Esta recuperación en el sector deja atrás la peor cara de la pandemia, mientras las previsiones se centran ahora en qué ocurrirá tras el fin del verano, donde el parón es más que evidente pese a los esfuerzos de convertir a Barcelona en una ciudad sin estacionalidad. Todo ello, tras una estrategia de ajuste de precios durante los últimos dos años para atraer al turista nacional. Si bien los hoteleros barceloneses no han desaprovechado la oportunidad para incrementar los precios debido a esas altas ganas de viajar tras la incertidumbre provocada, además, por la invasión de Rusia a Ucrania.
LA RENTABILIDAD DE LOS HOTELES, DISPARADA
«La actividad se ha recuperado con fuerza, pero habrá que esperar a octubre para conocer la evolución», han destacado fuentes del sector consultadas por este medio. Eso sí, creen que el resto de España y Cataluña continuarán siendo un destino clave, con un incremento de los viajes de negocios, un negocio en auge y que se está consolidando.
Las mismas fuentes esquivan hablar de precios de los hoteles, pero apuntan que el fuerte incremento de la electricidad y de los alimentos han obligado a adoptar una medida necesaria. Y es que, tras dos años de ERTE y cierres el sector no hubiera aguantado un tercero. En el cómputo de España, la llegada de turistas alcanzó los 12,3 millones, más de un 40% más respecto al mismo mes del pasado año, y por encima de los niveles de 2019. En total, 205.000 clientes más, pero en una menor estancia.
LOS NACIONALES SUPLEN LA BAJADA DE EXTRANJEROS
Asimismo, también se debe a que los españoles realizan menores estancias en los hoteles y miran más el precio a la hora de organizar el viaje. De esta manera, el 75% de los llegados a Cataluña, especialmente ingleses, franceses y alemanes, son extranjeros. En cuanto a los clientes nacionales, el número supera a los del pasado 2019, pero se nota el descenso de los extranjeros.
Esta subida de precio incidió directamente en la rentabilidad de las habitaciones disponibles, con un incremento del 56% respecto al 2019 y del 17% respecto al 2019, hasta alcanzar los 89,9 euros. Lejos quedan así los precios asequibles.