La remodelación de BiciMad: el despegue improbable a la cola de Europa

Madrid ha experimentado muchos cambios en los últimos años en cuanto a movilidad ciclista. Al nacimiento en 2014 de BiciMad (servicio municipal de alquiler de bicicletas de Madrid) hay que sumar todas las compañías de alquiler que, con mejor o peor suerte, han funcionado en la capital. Sin embargo, estas no han terminado de lograr el efecto deseado de adaptación. Quizás porque aquí no nos va la imagen copenhaguense de aglomeraciones de bicicletas y hacer todas las actividades sobre dos ruedas. O quizás también porque cuestan alrededor de diez veces más. Lo que está claro es que la infraestructura ciclista de Madrid es cuestionable por muchas vertientes.

Madrid se ha quedado atrás en lo que es una tendencia en toda Europa: que la bicicleta sea una alternativa razonable para todos. El desplome de BiciMad tras ganar adeptos a este medio de transporte al acabar la pandemia es una evidencia más de parte de la problemática: la mala prestación del servicio a causa de actos vandálicos que dejaron una gran parte fuera de servicio, y la falta de mantenimiento y de personal se plasmó en el número de abonados.

Ahora, el ayuntamiento de Madrid ha aprobado municipalizar el servicio para cubrir los 21 distritos de la urbe antes de las elecciones. Empleados de la compañía, en declaraciones a Somos Madrid, manifestaron su negativa a esta medida, que el área de movilidad confía que se apruebe en el pleno de septiembre. «Si cuando Bicimad crece eso no va acompañado de un aumento del personal, nos vamos a encontrar con el mismo problema una y otra vez, porque no podremos dar abasto con esa demanda”.

Está previsto que el servicio público de bicicletas inicie el plan de expansión en 2023 ampliando la red de carriles bici de la ciudad, el número de estaciones y de bicicletas. Habrá que esperar para comprobar como va evolucionando el planteamiento de un servicio que en su actual formato deja mucho que desear.

El desplome del servicio

Cuando terminó la cuarentena que nos retenía en nuestras casas, el uso de la bicicleta sufrió un incremento en el que una gran cantidad de madrileños sucumbió a este medio de transporte. A pesar de que parecía que el servicio, que no terminaba de arrancar, por fin veía la luz, no fue así. Fue en marzo de 2021 cuando se empezaron a palpar los problemas. El 60% de las bicicletas dejaron de se útiles, según datos ofrecidos por elDiario.es. El vandalismo y la falta de mantenimiento había dejado desiertas las estaciones. Entre el verano y el 31 de diciembre, 11.483 personas habían abandonado BiciMad.

El nuevo BiciMad

El responsable de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, ha explicado que la ampliación del servicio de Bicimad, tramitada en julio, se aprobará en el Pleno del mes de septiembre “si no se presenta ninguna alegación en dos o tres días” y tiene previsto comenzar así su ejecución en “los primeros días de enero”.

está previsto que bicimad comience el plan de expansión en 2023

El servicio público de bicicletas comenzará el proceso de expansión una vez entre el año 2023 gracias a la ampliación de un servicio que a día de hoy inscribe un desplome en la cifra de abonados desde hace más de un año, etapa durante la que se perdieron los clientes logrados en el confinamiento.

En cuanto al interrogante de si se expandirá la red de carriles bici que conecta la ciudad, Carabante ha dicho que Obras “está llevando a cabo una importante inversión”. Además, ha destacado las obras del Paseo de la Castellana, con las que esta vía “se convertirá en icono de la movilidad ciclista. En la columna vertebral”. Su primer tramo, entre Plaza Castilla y Nuevos Ministerios, se inaugurará antes de las elecciones. Colectivos ciclistas reclaman la extensión de los carriles bici segregados a otras partes de la urbe.

Copenhague, ejemplo a seguir

La bicicleta es, a día de hoy, una parte más de la cultura y el paisaje danés. Copenhague ha conseguido que sus ciudadanos abandonen el coche y lo cambien por la bicicleta, que es la manera más rápida y segura de moverse en la ciudad.

Más de 12.000 kilómetros de carriles y pistas para bicis recorren el país (400 kilómetros solo en la capital). Su uso ha aumentado tanto que en los últimos años han proliferado las autovías para bicis. Estas calles de comunicación unen las zonas residenciales con las áreas de trabajo y estudio de las ciudades danesas. En ellas, la prioridad es el ciclista, intentando garantizar el menor número posible de paradas para agilizar el movimiento. Están equipadas con semáforos y bombas de aire para hinchar las ruedas.

Madrid necesita que se cree una verdadera red que permita moverse por la ciudad con cierta lógica. La capital se ha quedado rezagada en lo que es una tendencia en, prácticamente, el resto de Europa.

Irati Bartolome
Irati Bartolome
Redactora en Merca2.es. Escribe sobre construcción e inmobiliario. Antes pasó por las secciones de divisas, finanzas y bolsa en Inversión.es. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.