El café es una de las bebidas más consumidas en todo el mundo, solo superado por el agua y el té. Para millones de personas forma parte de una rutina casi sagrada en la que no puede faltar una buena taza de café al comenzar el día. Su sabor intenso y sus efectos reconfortantes y estimulantes no pasan desapercibidos, pero además tiene otros beneficios para la salud. Aunque durante mucho tiempo estuvo bajo el punto de mira, y se consideró que no podía formar parte de una dieta saludable, recientes estudios parecen confirmar que es justo todo lo contrario.
8EL TRADICIONAL ES MEJOR

Por lo tanto, el café más saludable es que se prepara de forma tradicional, con una cafetera italiana, una eléctrica americana, o la clásica cafetera francesa de prensado. Además de ser un producto más natural, sin ningún tipo de añadido, podemos elegir el tipo de grano que deseamos tomar, su calidad, y saber qué cantidad de caloría estamos tomando. Dos o tres tazas al día es una cantidad que no se considera excesiva, y que nos permite disfrutar de esta rica bebida a la par que aprovechamos todas sus virtudes.