¿Lavas correctamente tu ropa interior? Los riesgos de no hacerlo

Existe varias prendas de ropa interior o lencería, con muchos estilos, para todos los gustos, femenina, masculina, o unisex, de un tipo de tejidos o de otro. Sin embargo, esta ropa guarda algunos riesgos que podrían afectarte si no actúas de forma adecuada. Si quieres conocer todos los detalles desconocidos sobre esta prenda íntima, aquí tienes las curiosidades más destacables: Calzoncillos, variedad para aburrir Los calzoncillos provienen de las antiguas calzas, y fue un tipo de ropa interior muy antigua, que data en torno al año 300 a.C.. Esta prenda ha evolucionado hasta nuestros días, con distintas modas en las diferentes épocas. Actualmente, existen 7 tipos de calzoncillos diferentes, como los largos o más clásicos, los modernos boxers que son los más usados actualmente, y también los slip, bóxer slip, tanga para hombre, los suspensorios y los ajustados. Siempre algodón La ropa interior no importa si la compras de un tipo o de otro, pero es muy importante que sea de fibras de algodón. Esto no es solo cuestión de calidad o de textura, el algodón es una fibra natural que evita muchos problemas de la piel y en la zona íntima. Es ideal para verano, ya que puede absorber muy bien la humedad, y es transpirante. No tiene productos químicos, y es duradera. Por tanto, no hay nada mejor que el algodón, especialmente si tienes la piel sensible. Curiosidades de la ropa interior femenina El origen de la ropa interior femenina está en la época de los griegos, donde las mujeres comenzaron a usarla bajo el nombre de apodesme. Se desconoce su creador, aunque se le atribuye a Mary Phelps, y su fabricación inicial se hacía con huesos de animales. Poco a poco fue evolucionando, pasando por modas de distintas épocas hasta la actualidad. No fue hasta 1930 cuando se introdujo el tallaje de los sujetadores, con letras A, B, C, y D. Victoria's Secret y su "secret" Victoria's Secret es una de las marcas de ropa interior femenina más conocidas. Pero no muchos saben que esta firma fue creada por un hombre. Se llamó Roy Raymond, y lo hizo porque pensó que a su mujer le encantaría acudir a un gran centro comercial a comprar solo este tipo de prendas. Entonces ideó tiendas para dar mayor comodidad de las compras a las clientas, y así nació esta marca que hoy es todo un gigante. La ropa interior push Up llegó en los 60 Ahora la denominación push up es muy conocida en el mundo de la moda, y hay varias prendas que lo son. Sin embargo, su origen se remonta a hace solo unas décadas, ya que este tipo de prendas se desarrolló en la década de los años 60. El ideólogo de este tipo de diseños fue de Wonderbra, una compañía que se ha mantenido hasta nuestros días. El sostén deportivo llegó en 1977 El sostén deportivo, que sujeta el pecho para practicar cualquier tipo de deporte de una forma más cómoda y con mejor fijación que con un sujetador convencional, no fueron inventados hasta el año 1977. Ese año nacería esta prenda de ropa interior femenina. La creadora se llamaba Lisa Lindhal, y lo hizo con un primer modelo que estaba destinado a su hermana, ya que siempre se quejaba cuando salía a correr de no poder mantener sus pechos en su lugar. La ropa interior se debe secar al sol No es necesario usar antimicrobianaos para lavar la ropa interior, como es el caso del cloro o del triclosán. Los jabones y detergentes convencionales son suficientes para lavarla. Eso sí, debes asegurarte de enjuagarla muy bien, para que no queden restos de estos productos que podrían irritar la piel. Lo que sí se debería hacer es secarla al sol, esto ayudará a eliminar de forma natural bacterias y hongos que puedan quedar en las fibras de la ropa. Lava siempre las prendas nuevas Es muy importante lavar las prendas de ropa interior antes de usarlas por primera vez. Algunas personas las usan sin lavar, puesto que piensan que como no se pueden probar, están limpias. Pero nunca se sabe, y aunque no se las hayan probado, pueden tener algunos gérmenes e incluso polvo del almacén o tienda. Por eso, es recomendable que la laves antes de usarla. Y, aunque es algo que casi nadie hace, se debería renovar cada 6 meses o, al menos, una vez al año. Y es que suele estropearse con los lavados constantes, y eso podría favorecer la irritación e infecciones. Lavarla siempre con jabón neutro y sin suavizante La ropa interior siempre se debe lavar usando jabón neutro, y siempre enjuagar con abundante agua para evitar que queden restos. Es importante lo del PH, ya que de otra forma puede afectar a la piel tan delicada de la zona. Por otro lado, deberías evitar el uso de suavizantes, especialmente si son muy fuertes o están perfumados, ya que esos químicos también pueden generar irritación o alterar el pH de la zona íntima. No la laves en la ducha Algunas personas aprovechan la ducha o la bañera para lavar su ropa interior, o usan la mampara para colgarla y que se seque. No deberías hacer esto, ya que algunas infecciones genitales como los hongos, como la candidiasis, pueden florecer con el exceso de humedad de los baños. Por tanto, mejor siempre tiende en una cuerda en el exterior al sol o, si no puedes, evita habitaciones húmedas. Siempre deben estar bien ventiladas.

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