La pelea entre el gremio de los taxistas y la presidenta de la Comunidad de Madrid sigue dando que hablar. Los taxistas siguen viendo como Isabel Díaz Ayuso intenta socavar el negocio con diferentes medidas y declaraciones que no hacen sino apoyar a su principal competencia, las VTC. Si bien hace unas semanas era el proyecto de ley Ómnibus, con el que se pretende reformar unas 32 leyes de la Comunidad, ahora han sido unas declaraciones que han sentado mal en el seno del sector, que reclama más medidas de defensa ante las VTC.
En una de sus últimas declaraciones públicas, la presidente ha lanzado algunas propuestas para mejorar el sector del taxi, que no han sido bien acogidas entre el sector. Algunas de ellas son las ayudas para su digitalización con la idea de que se incluyan en plataformas de movilidad con el objetivo de incrementar su facturación un 43%. Pero, sin embargo, el presidente de la Federación Profesional del Taxi de Madrid, Julio Sanz, ha defendido que en el campo de la digitalización está «al amparo de muchas plataformas», entre las que ha citado Pidetaxi, que aglutina a «más de 20.000 taxistas en toda España».
Otro de los puntos que ha tratado la presidenta es la liberalización horaria, de la cual se ha mostrado partidaria. Con esta medida, Ayuso persigue que los taxistas puedan trabajar las 24 horas del día los 365 días del año, con el objetivo de ingresar un 60% más. La presidenta de la Comunidad prevé la creación de 3.000 puestos de trabajo, ha sentenciado. Por su parte Sanz ha negado que el sector necesite una «liberalización» de los horarios porque perdería «seguridad y calidad» y ha recomendado a Díaz Ayuso que antes de promover «medidas de dudoso beneficio» para el colectivo primero les escuche.
«Con falsos datos de creación de empleo y eficiencia energética nos han querido vender unas nuevas normas de movilidad y decirle simplemente que actualmente el único servicio público de transporte de pasajeros en turismo de hasta 9 plazas es el taxi», ha apuntado Sanz. Igualmente ha señalado a Ayuso que el taxi lleva cumpliendo «más de 110 años las condiciones, regulación y tarifas».
Julio Sanz ha negado que el sector necesite una «liberalización» de los horarios
REGLAS DEL JUEGO
Igualmente, la presidenta sigue adelante con la intención de promulgar la ley Ómnibus, que busca la liberalización del sector para dar entrada a nuevos jugadores. Este apoyo explícito brindado por Díaz Ayuso a las VTC ha encendido los ánimos del sector del taxi, que acusa a la presidenta de la Comunidad de Madrid de «querer cambiar las reglas del juego por la puerta de atrás».
Una de las últimas apariciones de la presidenta fue cuando participó en la presentación de Uber Green, el servicio de transporte de Uber 100% eléctrico. En este evento señaló que la digitalización ha cambiado las reglas «de todo», incluida la movilidad, al tiempo que instó al sector del taxi a mejorar y a ser más competitivo y moderno.
Este gesto de Ayuso ha irritado a la gremial en general y al presidente de la Federación del Taxi de Madrid, Julio Sanz, en particular, quien ha reprochado a Ayuso haberse prestado a lo que entienden que ha sido un acto de «publicidad» actuando como una «mera comercial» de Uber. Empresa que, ha recordado, tributa en Holanda por lo que sus beneficios «no se quedan en la región».
«No estaría mal que cuando se promueven medidas de dudoso beneficio para el colectivo se nos atendiera. Así podría beneficiarse el sector y no cuatro o cinco empresas que representan a plataformas que tributan fuera de España y se llevan allí el rendimiento (los vehículos de transporte con conductor VTC)», ha señalado Sanz. El presidente de los taxis Sanz ha acusado a Ayuso de «cuestionar» el sector y tener «desconocimiento o mal asesoramiento» acerca del mismo porque «no hay sector del transporte más moderno, con una calidad media alta, con vehículos con rotación de menos de cuatro años y que lleva introduciendo una década vehículos eco y cero».
