El tejido industrial español vive un momento delicado. La situación de inestabilidad debido a la inflación sumada a la crisis derivada de la pandemia, está haciendo que las empresas necesiten una ayuda extra para salir adelante. Estas ayudas se están traduciendo en forma de Perte. Después del automovilístico y el agroalimentario, ahora es la industria textil la que espera la aprobación de esta subvención. Sin embargo, hay ciertas empresas que, sobre plano, saldrían más beneficiadas que otras.
Ha sido el Observatorio del Textil y Moda, en representación de los principales organismos y agentes del sector, el que ha pedido la aprobación de un Proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica. Con esta ayuda esperan paliar el impacto de la pandemia del coronavirus y la reciente crisis de precios de la energía, materias primas y distribución.
Además, la industria textil también considera que estas ayudas son cruciales para el posicionamiento de España como industria textil puntera dentro de Europa. Con esta subvención, el sector de la moda española podría cumplir con los retos fijados desde Europa, además de mejorar su competitividad. Para lograr todos los objetivos propuestos, el sector pide una inversión de 14.000 millones de euros.
Sin embargo, dentro de España, esta industria tiene un peso fundamental en tres comunidades principalmente: Galicia, Cataluña y la Comunidad de Madrid. Hasta el momento, solo los representantes de la comunidad gallega se han manifestado en aprobación de este Perte. Su presidente, Alberto Núñez Feijoo, ha destacado el gran número de empresas textiles que operan en su región. Esto hace que las empresas gallegas tomen la delantera.
Galicia cuenta con más de 500 marcas textiles que juegan un papel fundamental en la industria
IMPORTANCIA DE LA APROBACIÓN DEL PERTE
«Conseguir la aprobación de un PERTE sectorial es fundamental a la hora de poder alcanzar los objetivos marcados por el Observatorio: posicionar a España como líder en clave europea de las iniciativas en materia de circularidad y reducción del impacto ambiental, impulsar el ecodiseño de los productos y mejorar los procesos industriales, reduciendo la huella ambiental, promover la figura de España como hub europeo en la gestión de residuos e incrementar la digitalización vinculada a estos procesos», expone Adriana Domínguez, presidenta de Adolfo Domínguez y una de las líderes del Observatorio.
En concreto, tanto Adriana como el otro líder del Observatorio del Textil y Moda, Juan Parés, presidente de Textil Santanderina, esperan poder ayudar a las empresas del sector a que se adapten y adopten un modelo de industria 4.0 y de economía circular. Es decir, que se ponga el foco en el desarrollo tecnológico utilizando las tecnologías más avanzadas. Con ello, se mejora la productividad y la competitividad, además de reducir costes de producción.
Galicia es, por excelencia, la reina de la industria textil. Tal y como afirma Núñez Feijoo, en la comunidad norteña operan actualmente más de 500 marcas textiles, que lograron el año pasado una facturación de 30.000 millones de euros. «Solo hasta octubre del año pasado exportamos en el ámbito de esta industria 4.800 millones de euros», destaca el presidente.
De este medio millar de empresas gallegas, destacan por encima del resto Inditex, Roberto Verino o Adolfo Domínguez. La compañía fundada por Amancio Ortega es la líder en la industria de la moda. Todas ellas están inmersas en un proceso de digitalización de su industria y de sostenibilidad. Esta ventaja que tienen sobre sus rivales hace que puedan aprovecharse mejor de esta hipotética ayuda.
GALICIA JUEGA UN PAPEL FUNDAMENTAL
La industria textil y de la moda es uno de los sectores cruciales para la economía española. Actualmente, este campo representa el 2,4% del PIB del país, convirtiéndose así en uno de los principales motores sociales y económicos del territorio nacional. Además, este sector genera el 4,1% del empleo. También son muy importantes sus datos de exportación, tal y como señalaba Feijoo. En concreto, las exportaciones representan el 8,1% del total de las ventas de bienes al extranjero.
Por todos estos datos, desde el Observatorio del Textil y Moda, arropado por toda la industria, consideran fundamental tener su propio Perte sectorial. Lo que se rumorea hasta ahora es que lejos de concederle al sector lo que exige, se tratará de un proyecto de transformación general con la moda a la cabeza.
Es por eso que el organismo insiste en que «a pesar de esta relevancia, es un hecho que el sector textil y moda ha tenido que librar duras batallas desde que se inició la crisis sanitaria y está en plena transformación hacia la economía circular de impacto ambiental neutro. El Observatorio considera que, para completar el proceso y asegurar la fortaleza de la industria textil y de la moda es imprescindible el PERTE, que supondría una inversión cercana a los 14.000 millones de euros».
Aún hay que esperar para saber la decisión que tomará el Gobierno. «Esperamos noticias inmediatas», afirma Alberto Rocha, secretario general de Cointega-Clúster Textil Moda de Galicia. Además, este responsable resalta el papel de la comunidad autónoma en la industria. «Galicia juega un papel fundamental porque su peso es crucial. Estamos con la Xunta analizando la creación de una oficina técnica».
El sector espera que, gracias a su importancia en el conglomerado español, decante la balanza a su favor y le den la ayuda que piden. En el caso de aceptarse, Galicia deberá sacar una tajada considerable debido a su importancia. Ella sola tiene un valor de manufacturas cerca del 18% respecto al conjunto de España. Además, esta comunidad aglutina a las empresas más importantes del sector.