¿Se quedarán los autónomos morosos sin ayudas?

Las alarmas se han disparado ante la posibilidad de que la nueva legislación prohíba o dificulte mucho a los autónomos morosos poder acceder a las ayudas públicas. Una noticia que ha caído como un jarro de agua fría entre el colectivo. Aunque el objetivo de esta medida es intentar acabar con la morosidad, lo cierto es que en la situación actual son muchos los profesionales que podrían verse privados de ayudas cuando están atravesando un mal momento a nivel económico. La Ley Crea y Crece Esta nueva norma va a suponer toda una revolución, ya que llega con muchas novedades, entre ellas la posibilidad de crear empresas con un solo euro como capital social. También traerá cambios para los autónomos. En ella se prevé la posibilidad de que los autónomos morosos no puedan acceder a subvenciones públicas si tienen deudas pendientes de pago con sus proveedores o con cualquier Administración Pública. Una medida para luchar contra la morosidad El objetivo de esta prescripción es acabar con la morosidad, un fenómeno que ha estado en aumento desde que comenzó la pandemia. De hecho, la medida es a la vez mala y buena para los profesionales que trabajan por cuenta propia. Mala, porque si tienen deudas pendientes se pueden quedar sin acceder a las ayudas (incluidas las derivadas de los Fondos Europeos), y buena, porque sus clientes (si son empresas o autónomos) estarán en la misma situación y seguramente pagarán antes sus deudas. Una medida que no es nueva En realidad, esta prescripción legal no es algo nuevo en nuestro ordenamiento jurídico. La Ley de Morosidad también prevé que los autónomos morosos puedan perder sus bonificaciones o reducciones si no cumplen con sus obligaciones económicas. Se trata así de hacer presión para que los profesionales no acumulen deudas sin pagar. Sin embargo, cuando alguien no tiene dinero para pagar, ni siquiera una medida de este tipo puede conseguir que cumpla. ¿Qué dice exactamente la Ley sobre los autónomos morosos? El artículo 11 de la Ley Crea y Crece modifica el artículo 13 de la Ley 38/2003, que es la Ley General de Subvenciones. Lo que determina este precepto es que los autónomos que tengan deudas no podrán ser beneficiarios de ayudas si incumplen los plazos de pago previstos en la Ley de Morosidad. Esta medida afecta a todo tipo de ayudas y subvenciones de carácter público. Así que tras su entrada en vigor los autónomos con deudas no podrán acceder ni a las ayudas directas ni a ninguna otra. Una posible modificación de Ley Aunque la Ley Crea y Crece es nueva en nuestro ordenamiento jurídico, los expertos ya hablan de una posible modificación de cara al futuro para hacerla todavía más dura y reducir las tasas de morosidad. Lo que se propone es obligar a los autónomos a mantener su situación de estar al corriente de pago durante un tiempo tras recibir la subvención. Si no lo hacen, tendrán que devolver el dinero que hayan recibido. Una medida que llega en un momento complicado Aunque los expertos coinciden en que esta medida que estamos analizando puede ayudar a reducir los niveles de morosidad, también son realistas y señalan que para algunos autónomos este puede ser el fin. Existen muchos “autónomos zombie” que están sobreviviendo a base de ayudas, pero casi todos ellos tienen deudas. Si ahora se les priva del acceso a las subvenciones, lo más probable es que tengan que dar por finalizada su actividad. La novedad de la factura electrónica Las medidas que afectan a los autónomos morosos en su acceso a las ayudas no son las únicas que prevé la Ley Crea y Crece, otra de las novedades es la implantación obligatoria del uso de la factura electrónica. Esta modalidad de facturación, que ya es obligatoria en las relaciones entre autónomos y Administraciones Públicas cuando estas últimas operan como clientes, se extiende ahora a todas las operaciones comerciales. La factura electrónica para reducir la morosidad Lo que se busca con esta medida es que exista una mayor trazabilidad de la facturación y del control de pagos entre empresas y trabajadores por cuenta propia, así como conocer los plazos efectivos de pago. Se va a crear un Observatorio de Morosidad Nacional que a través de este tipo de facturas hará un seguimiento y evolución de la morosidad. El problema es que muchos autónomos desconocen cómo se hace una factura electrónica o no disponen de tecnología para ello. Crear empresas con un euro Otra de las novedades previstas en la nueva legislación es la posibilidad de crear empresas que tengan como capital social mínimo la cifra de un euro. Con ello se pretende agilizar el proceso de creación de empresas. Porque hasta ahora el capital social mínimo para una sociedad limitada era de 3.000 euros, algo que para algunos emprendedores es muy difícil de conseguir. No obstante, esta medida tiene algunos matices. Más agilidad en la creación de empresas No solo se reduce la cantidad que hay que tener como capital social inicial, también se quieren agilizar los trámites. El objetivo es que la empresa pueda estar lista para operar en solo 10 días. Con esto se pretende dar cumplimiento a una de las demandas más importantes de los emprendedores españoles, que siempre han denunciado que crear una empresa en España es complicado, caro y un proceso largo.

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La novedad de la factura electrónica

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