Tras la pandemia la videollamada se ha convertido en una forma de comunicación muy habitual. Pero no es lo mismo hacer un Zoom con un amigo que hablar con un cliente o con un inversor, en el segundo caso hay que cuidar mucho más la imagen.
Muchos emprendedores están aprovechando el poder de las nuevas tecnologías para hacer negocios en cualquier lugar del mundo, pero cuando llega el momento de ponerse delante de la cámara para charlar no se sienten del todo cómodos con la imagen que transmiten. Veamos cómo solucionarlo.
1Ajusta el ángulo de la cámara
La forma en la que la cámara te enfoca durante la videollamada influye mucho en cómo es la imagen. A nadie le gusta sufrir el temido efecto papada o que su rostro no se vea con las proporciones que realmente tiene.
Para evitar esto es importante que la cámara esté un poco por encima de los ojos, en paralelo. Si no puedes mover el equipo informático para conseguir un buen ángulo, prueba a regular la altura de la silla.