Pérez Tornero ensucia a los medidores de audiencia para justificar la pérdida de pegada de TVE y RNE

José Manuel Pérez Tornero asegura que RTVE representa «un proyecto de país» que al carecer de presión publicitaria ofrece «una bocanada de libertad». Eso sí, el proyecto estatal y la libertad todavía no se conjuga con el seguimiento esperado después de que TVE y RNE coqueteen con sus mínimos históricos.

La primera cadena de la radiotelevisión pública estatal marcó en mayo su mínimo histórico con un dramático 8,2% de share, según datos de Kantar Media, y RNE cerró 2020 con poco más de un millón de oyentes, según la AIMC que sirve el EGM.

Pérez Tornero, presidente de RTVE, sortea la autocrítica sobre ambas situaciones y sigue echando la culpa a los medidores: en septiembre cargó contra Kantar Media por las audiencias televisivas y la pasada semana despreció las mediciones de la AIMC sobre las audiencias radiofónicas.

RNE

El presidente de RTVE aseguró la pasada semana en el Forum de la Nueva Comunicación que RNE «está más viva que nunca, que «su impacto es mayor del que se dice» y que «no está bien contemplada por los estudios». Le faltó añadir que iba a dar de baja a la radio pública del EGM, tal y como hizo su antecesor José Antonio Sánchez en tiempos del aznarismo.

Pérez Tornero afirmó también que «en este país se confunde audiencia con aceptación. A las audiencias activas que comparten la información son a las que hay que prestarles atención».

NO ES LA PRIMERA VEZ

Estas palabras recuerdan a las del directivo este pasado mes de septiembre sobre las audiencias de televisión: «En informativos casi somos los primeros en España. El problema es que los audímetros que utilizan las empresas para los sondeos dan una realidad parcial de la audiencia. No vamos a dejar de prestar atención a los datos en bruto de las mediciones, pero vamos a intentar complementarlos y mejorarlos, aunque esto sea un proceso lento».

Pérez Tornero siguió con su negacionismo y dijo que «no se trata de esconder la cabeza debajo del ala. Vamos a intentar recuperar la audiencia. Otro tema es qué otras perspectivas podemos adoptar sobre las audiencias».

El Partido Popular, que debería hablar poco de este tema por su habitual gestión de las televisiones públicas, le afeó los comentarios: «Ustedes llaman públicamente a relativizar las audiencias, un mensaje con cierto peligro como cuando los malos estudiantes dicen que las notas es mejor que no cuenten».

OTRAS POLÉMICAS

Pérez Tornero también ha sembrado la polémica a nivel interno en RTVE porque sobre Eurovisión comentó que «no convendría todavía que ganásemos», quizás por el coste que supondría la organización al siguiente año.

El directivo, ilusionado con la puesta en marcha del Benidorm Fest con el que RTVE elegirá a su representante en el festival de la canción europea, afirma que se van a tomar «muy en serio Eurovisión. Nos interesa el evento en su naturaleza europea, de contacto de la juventud. Igual que el Erasmus ha funcionado como un programa europeo de éxito, Eurovisión está teniendo una popularidad entre sectores de la juventud y es una ocasión de encuentro en Europa».

UGT, puntal de Pérez Tornero, también es noticia en RTVE porque ha criticado a Comisiones Obreras porque su representante en el Consejo de Administración de la pública es a su vez miembro del jurado de unas oposiciones internas en la Corporación pública.

«¿La participación de Roberto Lakidain en el tribunal de cambio de categoría para informador que la CRTVE está celebrando es legal? Sí, porque como trabajador y a propuesta del sindicato CCOO, es legal que forme parte de él. ¿Es ético que un miembro del Consejo de Administración, da igual a propuesta de qué partido haya sido, forme parte de un tribunal siendo representante del más alto rango de la empresa? No», afirman.

UGT cree que «desde el momento en que una persona forma parte del Consejo de Administración de la CRTVE, o alta dirección, debe de desvincularse porque es garante de la legalidad y del buen hacer de los procesos en última instancia. No se puede ser juez y parte. Si es cierta la afirmación de que se defiende un código ético de independencia, pluralidad, y trasparencia, se debe dimitir como miembro de este tribunal de forma inmediata».

«Para nosotros y nosotras es tan importante el hecho legal como el hecho ético. Y todos los participantes a dicho proceso deben tener la garantía de que serán juzgados desde una perspectiva legal, ética, trasparente e independiente», añaden.

UGT también es criticada por otros homólogos por su incomodidad con el Premio Ondas que ha recibido la plataforma juvenil Playz unos meses después de que el sindicato cargase contra «los mensajes y valores que se transmiten a través de la programación de este canal».

«De nuevo el canal Playz nos deleita con un debate de la llamada ‘ley trans’ no solo desequilibrado en cuanto a las posiciones de las personas invitadas, sino que además se incluyen intervenciones que en vez de fomentar el diálogo y la reflexión incitan al odio y la violencia contra las feministas que cuestionan el borrador de la ley. No es la primera vez que las etiquetan de TERF (feminista radical trans-excluyente) como insulto, denigrándolas y, esta vez, directamente incitando a la violencia contra ellas», decían en UGT. Y ahora el sindicato ha quedado en mal lugar…