Iberdrola ha vuelto a dar un golpe de fecto. Tras la presentación semestral de resultados, el presidente de la compañía ha realizado un anuncio de altos vuelos: está estudiando «con muchísimo detalle» una posible segregación (‘spin-off’) de su negocio de eólica marina.
El movimiento que ha presentado Ignacio Sánchez Galán, que tiene un posicionamiento económico ante el gran auge que tiene esta tecnología renovable, también se contextualiza en un ahorro de costes ante unas inversiones que se habían disparado. Hace un año, MERCA2 explicaba que la eléctrica española estaba preocupada por los elevados costes de estas infraestructuras. Así, han tenido que tomar esta decisión.
Ha sido en una conferencia con analistas para presentar los resultados del primer semestre, Galán subrayó que el grupo «siempre» está estudiando «todas las medidas potenciales para optimizar su balance y su perfil financiero en áreas atractivas», como puede ser la eólica marina.
Así, el directivo, que indicó que de todas maneras aún no hay tomada una decisión al respecto, destacó el potencial de este negocio, una de las grandes apuestas de la energética a futuro y donde es puntera en el mundo, que genera unos 600 millones de euros de resultado bruto de explotación (Ebitda).
Iberdrola ya opera más de 1.300 megavatios (MW) de esta tecnología y avanza, conforme al calendario previsto, en los proyectos de Saint Brieuc (Francia, 496 MW), Vineyard Wind 1 y Park City Wind (800 y 804 MW en Estados Unidos, respectivamente) y Baltic Eagle (Alemania, 476 MW), que le permitirán duplicar su capacidad offshore en los próximos años.
Además, la estrategia de la energética en el segmento eólico marino se verá impulsada por los procesos de subastas previstos a corto plazo en los principales mercados donde opera o está posicionada: Europa (37.000 MW entre 2021-2022), Estados Unidos y Asia Pacífico (13.800 MW hasta 2024).
En este sentido, Galán apuntó que el grupo prevé el desarrollo de 12.000 MW ‘offshore’ hasta 2030, con unas inversiones de unos 30.000 millones.
VIETNAM
Asimismo, confirmó el interés del grupo en un país como Vietnam, con un acuerdo para hacerse con una cartera de casi 600 MW, compuesta por cinco parques eólicos, y que prevén poder empezar antes de 2022-2024.
En este sentido, Galán afirmó que Vietnam es un país como un objetivo «muy claro» en renovables para 2030 y que cuenta con una regulación «atractiva».