¿Cómo y por qué ponerte un sueldo a ti mismo al emprender?

Aunque el dinero es importante, en la mayoría de los casos quien decide emprender no lo hace guiado únicamente por una motivación económica. No obstante, ponerte un sueldo es una de las primeras cosas que tienes que hacer en cuanto tu negocio empieza a generar rendimientos. Si no lo haces, acabarás gestionando tus recursos económicos de forma ineficiente.

Si tuvieras un trabajador le pagarías un sueldo, ¿verdad? Pues lo mismo debes hacer contigo mismo. Tu negocio debe pagarte un salario adecuado a tu trabajo y a las ganancias que obtiene. Esto evitará que acabes “metiendo la mano en la caja” para sufragar tus gastos personales.

Cuentas separadas para tu negocio y para ti

formula para ponerte un sueldo

Empecemos por el principio. Una de las primeras cosas que tienes que hacer es separar tus finanzas personales de las de tu actividad profesional. Debes tener una cuenta corriente propia para tu negocio que no vas a tocar para absolutamente nada que no tenga que ver con tu empresa

Si usas los ingresos de tu negocio para pagar la compra semanal de tu casa, ¿cómo vas a pagar la factura de ese proveedor que esta por llegar? ¿Tendrás liquidez cuando haya que pagar impuestos? Para evitarte quebraderos de cabeza, tú ten tu cuenta corriente y que tu negocio tenga la suya propia.

Mayka J.
Mayka J.
Jurista por formación y escritora por vocación. Llevo más de diez años dedicada al mundo de la redacción con especialidades como Derecho, pymes, autónomos, emprendimiento y marketing digital.