Instituto Médico Láser luce negocio en un palacete de Chamberí valorado en 25 M€

La Casa Palacio Nerva fue encargada por la marquesa viuda de Oliva y de Nerva a finales del siglo XIX en pleno corazón de Chamberí, y en 2005 fue adquirida por Instituto Médico Láser (IML) para instalar, tras una profunda remodelación, su clínica de tratamientos médico-estéticos. Teniendo en cuenta el precio tensionado del momento, su tasación actual se situaría en unos 25 millones de euros.

El palacete está ubicado en el Paseo General Martínez Campos 33, esquina con la calle Zurbano 53, una de las esquinas más cotizadas y atractivas de este lujoso y castizo barrio madrileño. Fue un proyecto encargado al arquitecto Valentín Roca y Carbonell, que se convirtió en un referente del modernismo en Madrid.

En concreto, consta de un total de 2.181 metros cuadrados, repartidos en cuatro plantas de altura, así como un jardín con una singular fuente. Los propietarios de la compañía médica llevaron a cabo una completa rehabilitación entre 2005 y 2006, cuya inversión total superó los 3 millones de euros. Además de la remodelación, realizaron obras en las instalaciones para adaptarlas a su nuevo uso, conservando de forma rigurosa su original carácter palaciego.

Hasta su adquisición por parte del doctor Javier Moreno Moraga y su mujer, la doctora Josefina Royo de la Torre, este palacete se encontraba en desuso, en una situación de semi-abandono y tardó más de un año y medio en venderse. Pese a la utilización muy limitada de las instalaciones, el Palacio Nerva mantenía un excelente estado estructural gracias a la calidad de la construcción original.

Actualmente, si los propietarios decidieran poner en venta este inmueble, un valor razonable podría ser entre los 12.000 y 15.000 euros/metro cuadrado, por lo que el precio de partida podría ser de 25 millones, según ha explicado a MERCA2 un experto en real estate.

FACHADA EN ABANICO

Si algo caracteriza a este edificio es precisamente el eclecticismo. Roca apostó por resolver la situación en esquina de esta superficie desarrollando una fachada en curva continua con un eje en el chaflán. Su traza es completamente neoclásica, con una cornisa discontinua en sucesivas curvas que oculta un cuerpo superior retranqueado.

La conservación de la esencia palaciega francesa ha conllevado que, tanto el edificio como el jardín, se encuentren actualmente protegidos en el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid, en los niveles Integral e Histórico.

Tras la remodelación, en diciembre de 2006 la sede del IML se trasladó desde su anterior consulta ubicada en la calle Almagro. Se trata de unas instalaciones cargadas de arte, y sus clientes tienen la impresión de acudir a un museo. Este centro multidisciplinar de tratamiento médico y quirúrgico ya ha tratado a más de 125.000 pacientes desde 1996 cuando empezó su andadura.

En concreto, la planta 1 es quirúrgica (con quirófano, área de recuperación, sala de curas y sala de médicos) y unidad de cirugía mayor ambulatoria. En la planta 2 se sitúan la recepción, unidad de dermatología y unidad de medicina estética facial. La planta 3 consta de la unidad de flebología y la unidad de depilación láser, mientras que en la planta 4 ofrece los servicios de la unidad de cirugía plástica y estética, unidad de cirugía maxilofacial, unidad de endocrinología y unidad de medicina estética corporal.

CHAMBERÍ, LA OPCIÓN DE LOS RICOS

Este distrito se sitúa a pocos metros de la principal arteria empresarial madrileña, el Paseo de la Castellana, y engloba la mayor cantidad de palacetes de toda la capital. De hecho, en los últimos años se está registrando un mayor interés por parte de inversores extranjeros que apuestan por comprar edificios enteros en esta zona.

El objetivo de estos inversores es realizar una rehabilitación total del mismo, respetando la fachada principal en la mayor parte de los casos, y convertirlo en un edificio de viviendas de lujo, un segmento que cuenta con una demanda al alza, y cuyos precios no han descendido, pese a los efectos económicos del covid-19.

Asimismo, muchos bolsillos pudientes se están decantando por este barrio y no por la ‘Milla de Oro’. El Barrio de Salamanca engloba propietarios y comercios de alto standing, pero los nuevos compradores prefieren decantarse por edificios rehabilitados con viviendas vanguardistas y con las últimas novedades en eficiencia energética, como ofrecen los activos en venta en la zona de Chamberí.