Captar clientes es una de las actividades a la que más tiempo hay que dedicarle dentro de un negocio. El emprendedor sabe que nunca puede despistarse y que siempre tiene que estar a la “caza” de más personas interesadas en sus productos y servicios. Sin embargo, no es esta la única forma de aumentar la rentabilidad.
A veces captar clientes no significa conseguir clientela nueva, sino fidelizar a la que ya se tiene. Porque el verdadero objetivo de tu negocio no debería ser tener miles de clientes, sino tener algunos menos y que cada uno de ellos gaste un poco más y acuda a ti de forma recurrente cada vez que necesite un determinado producto o servicio.
Piensa en un panadero. El producto que vende es bastante barato y su margen de venta es pequeño, porque apenas gana unos céntimos con cada barra. Ahora bien, si consigue que por su establecimiento pasen cada día X clientes fieles, tiene un ingreso asegurado. Además, si lo hace bien, es posible que el gasto medio de estos se vaya incrementando, porque adquirirán otros productos.
2Para captar clientes primero tienes que conocerlos

Está claro que no hay más secreto que hacerlo bien, pero para empezar a fidelizar a la clientela primero tienes que conseguir que tu público potencial te conozca. Y para poder llegar a conectar con él eres tú quien primero debe tener claro quién es su público. ¿Quienes son las personas que pueden tener más interés en tus productos o servicios?
Cuanto más conocimiento tengas sobre tu sector de mercado más sabrás sobre los intereses, las preocupaciones, los gustos y las necesidades de las personas de tu nicho. Esto te permitirá ofrecer productos o servicios que se adapten mucho mejor a lo que están buscando, y darles la atención que quieren.