La mascarilla ‘mata Covid-19’: dónde comprarla y por qué es tan efectiva

En España se han desarrollado algunos inventos bastante interesantes para combatir el Covid-19, como la famosa pintura de grafeno de la empresa andaluza Graphenstone y que está triunfando en multitud de países. El CSIC también ha contribuido en la creación de un modelo de mascarilla que no solo te protege como otras de categoría similar, sino que además es capaz de matar al Covid-19.

Esta mascarilla es un producto bastante interesante que deberías conocer por sus propiedades, ya que podría ahorrar algunos problemas que pueden ocurrir con las convencionales. Y, por supuesto, para poder aprovechar estas magníficas cualidades, también deberías conocer dónde la puedes comprar…

Todo lo que debes saber sobre esta mascarilla

¿Qué es la mascarilla «mata Covid-19»?

CSIC

El CSIC ha impulsado una interesante investigación sobre filtros viricidas para mascarillas con los que, no solo protegerte como hacen otras mascarillas, también para eliminar los virus que puedan quedar en la superficie de este tipo de elemento de protección.

Además de eso, son únicas en el mundo, ya que también son biodegradables. Eso hace que no supongan una amenaza para el medio ambiente, algo que es importante debido a la enorme cantidad de mascarillas que se está consumiendo en todo el mundo debido a la pandemia y dónde terminan muchas de ellas…

En cuanto a la mascarilla, se trata de un sistema basado en un filtro de nanofibras con tecnología española de Proveil. Es fruto del trabajo del equipo de investigación del CSIC (Consejo Superior de Investigaciones Científicas), una de las entidades de investigación más importantes de toda Europa.

Allí no solo se están desarrollando vacunas y medicamentos para combatir la Covid-19, también surgen este tipo de elementos que pueden ayudar en el día a día mientras se encuentra otra solución.

El desarrollo estuvo dirigido por José María Lagarón, del IATA-CSIC, y la empresa tecnológica base del CSIC Bioinicia.

Resultados

El producto no se hizo esperar demasiado para su comercialización en farmacias y supermercados, y no solo en España, también han despertado interés en países como Alemania y en Latinoamérica.

Y se puede aplicar a multitud de mascarillas autofiltrantes, como las conocidas FFP1, FFP2 y FFP3, así como las quirúrgicas. Pero, además de las propiedades conocidas de éstas, también eliminas esos virus que puedan quedar en los filtros por esa capacidad viricida, lo que puede ayudar a usarlas durante más tiempo que las normales.

La UJI también ha participado en este proyecto, ya que ha sido su Grupo de Polímeros y Materiales Avanzados los que se han encargado en certificar que realmente tengan las capacidades viricidas y biodegradables de las que presumen.

Bioinicia S.L., la citada spin off del CSIC, también ha sido clave en el desarrollo de la mascarilla. Esta empresa con sede en Valencia se ha encargado de la producción de los filtros. Además, también ha participado el AITEX. Tras esa producción inicial a cargo de Bioinicia, también se han asociado con otras cuatro empresas fabricantes para ampliar la capacidad de producción. Eso da lugar a un stock de millones de unidades fabricadas y precios por unidad de mascarilla inferior a 2€ en el caso de las FFP2 y de 0.30€ en el caso de las quirúrgicas.

En cualquier caso, el resultado han sido unos filtros superiores a los convencionales, con una porosidad mucho más fina para retener incluso esas partículas diminutas que otros dejan pasar. Para ello se ha empleado nanofibras que son hasta 10.000 veces más pequeñas que el grosor de un cabello humano. Y, por supuesto, esto detendría también al SARS-CoV-2.

Isaac R. P.
Isaac R. P.
Escritor y blogger, blogger y escritor. Las letras en libros o en WordPress son mi vida actual. Siempre intentando contar la verdad, evitando la manipulación y el clickbait. Apasionado por contar historias, por escribir artículos de interés y por ayudar.