Los errores que cometemos con el jamón ibérico

En España consumimos grandes cantidades de jamón ibérico. Es un alimento rico en proteínas y otros niveles nutritivos. El jamón está rico como sea, pero lo ideal es comerlo de origen ibérico. Este sale de los cerdos que se crían en las dehesas de nuestro país libremente. Suelen ser negros y tienen unas carnes bien prietas que sacan los mejores jamones sin lugar a dudas.

El jamón ibérico tiene muchos secretos. Hay que saber cortarlo, guardarlo, envasarlo, etc. Te enseñamos todos los errores que se puede cometer con este alimento para consumirlo. ¡No te lo pierdas!

Utilizar cuchillos no adecuados en el jamón ibérico

lonchas

No usar los instrumentos adecuados para cortarlo es uno de los errores más frecuentes que se pueden tener. Hay que utilizar un cuchillo de hoja ancha (cuchillo jamonero), otro que pela el jamón y el último el de puntilla que despega el hueso de la carne.

Deben de afilarse en condiciones. Normalmente cogemos el primer cuchillo que tenemos a mano y esto no debe de hacerse. Y eso, aunque puedas pensar que no pasa nada, lo cierto es que sí porque el corte no es igual y además haces que el resto del jamón no se corte de manera debida, afectando al sabor de las lonchas.

Cortar el jamón ibérico es todo un arte, por lo tanto, hay que hacerlo de forma correcta. Destrozar la pieza con un cuchillo casero es lo peor que se puede hacer.