
Los autónomos no necesitan ser expertos en cuestiones tributarias, pero sí deben saber lo suficiente de impuestos como para asegurarse de que están cumpliendo correctamente con sus obligaciones fiscales. De ahí la importancia de que un autónomo sepa manejar conceptos básicos como los de retenciones e ingresos a cuenta.
Existen diferentes rentas sujetas a retención, así como diferentes personas físicas y jurídicas obligadas a practicar esa retención e ingresar posteriormente el dinero en Hacienda. Es fundamental hacer estos trámites bien para evitar sanciones, sin importar si eres quién sufre la retención sobre sus ganancias o quién debe hacer el ingreso a cuenta.
4¿Qué son los ingresos a cuenta?

En el proceso de facturación intervienen dos partes: quién elabora la factura y quien la recibe. Pues bien, mientras que indicar la retención a practicar sobre sus ingresos es una obligación del autónomo que factura, el ingreso a cuenta es una obligación del autónomo o la empresa que recibe esa factura. Implica que debe abonar a Hacienda esa parte de la factura que va a descontar del pago que hará al acreedor.
El ingreso a cuenta implica declarar esas cantidades que se han retenido y hacer el posterior ingreso en Hacienda en la forma y el tiempo legalmente previstos. Si el obligado al ingreso a cuenta no ingresa las retenciones de IRPF del autónomo, la responsabilidad caerá sobre dicho obligado y no sobre el autónomo, que es en este caso el perjudicado.