La pandemia del coronavirus ha provocado un turismo atípico este verano en el que además de detectarse preferencia por el turismo doméstico y lugares poco masificados, se ha percibido un notable aumento del número de cancelaciones con respecto a 2019, debido, principalmente, a la situación provocada por la crisis sanitaria.
Sin embargo, a pesar de que todas las previsiones que se auguraban para el verano eran negativas, un volumen importante de las reservas realizadas se ha mantenido y se han generado otras nuevas, sacando a flote a muchos destinos de la geografía española, según Insights-X for Destinations, la herramienta de análisis de datos en tiempo real creada por TravelgateX y Top Tourism Marketing, que ha analizado las reservas y las cancelaciones durante este verano.
En general se ha detectado un notable aumento del número de cancelaciones con respecto al pasado año, debido, principalmente, a la situación provocada por la crisis sanitaria.
Sin embargo, muchas empresas han flexibilizado sus políticas de cancelación ofreciendo mayores facilidades a los viajeros para reservar y poder cambiar sus planes de viaje, dando de esta forma mayor seguridad y confianza a los usuarios. Esto ha sido lo que más ha ayudado a recuperar una parte de las reservas.
Andalucía, destino nacional líder en volumen de reservas durante los meses de julio y agosto, ha llegado a niveles de un 53% del mismo período de 2019. El mercado principal, como se preveía, ha sido el español, por delante del británico, que en agosto experimentó una caída en el número de reservas.
Su estancia media ha sido de 4,62 noches, un dato que prácticamente no ha variado en comparación a 2019, cuando se registró un valor ligeramente superior a las cinco noches; y el precio medio por habitación y noche se ha mantenido (167,21 euros), con tan solo una caída del 4%.
En cuanto a Islas Baleares, destino que ocupa la segunda posición en volumen de reservas a nivel nacional, ha llegado al 34% de las reservas del mismo período del año anterior. También destaca como mayoritario el turismo doméstico, mientras que, por ejemplo, mercados como el británico o el italiano han llegado solo a un 19% y un 18% respectivamente, con respecto al año anterior.
La estancia media ha sido de casi seis noches (5,91), un dato muy positivo, y el precio medio solo se ha reducido en un 2,8%(153,8 euros).
Islas Canarias, por su parte, ha recuperado un 39% de las reservas realizadas para los meses de julio y agosto, con respecto a las mismas fechas de análisis de 2019. Al igual que en el resto de comunidades, los españoles fueron los que más visitaron estas islas (con 47% de las reservas efectivas), mientras que los británicos han registrado solo un 25% del volumen de contrataciones.
En comparación al año pasado, la estancia media en Islas Canarias ha aumentado un 1,2% hasta las 6,38 noches, un dato muy alentador; mientras que el precio medio prácticamente no ha variado (110,89 euros).
El volumen de reservas de viajes a Cataluña se ha recuperado en un 30% respecto al 2019, siendo también los turistas españoles los que más confiaron en este destino.
El mercado británico disminuyó sus viajes a la región, manteniendo sus reservas en un 20% en relación con el año anterior. En este caso se registra el mayor descenso de la estancia y el precio medios, con caídas del 1,8% y el 4%,respectivamente (con 4,6 noches y 130 euros).
Para finalizar, en la Comunidad Valenciana las reservas se han recuperado en un 42% respecto al mismo periodo del año anterior (julio/agosto). Igualmente, los españoles son los que más han viajado hacia esta comunidad.
De los mercados internacionales, en este caso, el británico ha sido el que mejor se ha recuperado (un 29%) para esta región. La estancia media se situó en las 4,2 noches y el precio medio fue del 132,90 euros, con una bajada del 4,5%.