Tenemos la suerte de que Alberto Chicote comenzara durante la cuarentena a compartir en Instagram algunas de sus recetas, trucos y secretos para preparar los platos más comunes de nuestra gastronomía, como el gazpacho o la tortilla de patatas. Una de las mejor valoradas por el público ha sido la del cachopo asturiano. El cocinero ha explicado en la red social la forma en la que él prepara este plato para conseguir unos cachopos deliciosos pero un poco más ligeros.
Los cachopos de pollo son tradicionales en la cocina Asturiana, y tan populares en el resto del país como la sidra, la fabada, el arroz con leche o la reina Letizia. Hasta tal punto que se llegan a celebrar concursos de recetas donde se compite para ver quien prepara el mejor cachopo. La versión de nuestro chef favorito tiene su propio toque y quienes ya lo han probado, aseguran que es fácil de preparar y el resultado es delicioso.
INGREDIENTES PARA EL CACHOPO ASTURIANO
Los ingredientes para preparar un buen cachopo asturiano son fáciles de encontrar, pero Chicote recuerda en sus redes sociales, que se deben utilizar materias primas de calidad para obtener un resultado de chuparse los dedos.
- Filetes de pechuga de pollo
- Jamón ibérico o jamón serrano
- Queso, preferentemente manchego pero se puede utilizar otra variedad
- Pan rallado
- Harina
- Huevo
- Salsa sriracha
- Aceite de oliva extra virgen
- Mostaza
- Romero
- Pimienta negra
- Sal
PREPARACIÓN
Comezamos extendiendo los filete de pollo en una superficie y aplastarlos para que tengan todos el mismo grosor. A continuación sazonamos con sal, pimienta negra. mostaza, romero picado, salsa sriracha.
Sobre cada filete colocamos una loncha o rebanada de queso, tipo manchego o cualquier otro que se funda bien. Encima del queso colocamos unas lonchas de jamón serrano y tapamos con otra capa de queso. Finalmente cerramos con otro filete de pollo y lo envolvemos bien apretado con papel film. Y aquí viene el truco de Chicote: si lo dejamos como mínimo 12 horas en la nevera, nos aseguraremos de que el cachopo se mantenga perfecto y armado al empanarlo y freírlo. Transcurrido ese tierno los rebozamos, primero en harina, luego en huevo batido y para terminar en pan rallado. Alberto recomienda freírlos en sartén, antes que en freidora, y utilizando aceite de oliva virgen extra. Cuando estén dorados los retiramos y los colocamos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite. Y ya están listos para comer.