El coronavirus apaga el tenis y deja sin un pastizal a Madrid

El Coronavirus apaga el tenis en Madrid. La pandemia ha conseguido echar el cierre de todas las grandes competiciones deportivas de todo el mundo, excepto los juegos olímpicos que hasta día de hoy siguen en pie. De esta catástrofe no se ha salvado el Mutua Madrid Open y su clausura significará que la capital pierda más de 100 millones de euros.

El torneo es uno de los buques insignias de la cuidad, gracias a los grandes beneficios que reportan tanto económica como socialmente. Para esta edición se estipuló con que el open conseguiría unas ganancias superiores a las del año pasado, pero este revés ha supuesto tener que despedirse de todo.

En el 2017, según un estudio de la Universidad Europea de Madrid recogido por Okdiario, el Mutua Madrid Open reportó unos beneficios de 107 millones de euros, teniendo en cuenta el gasto medio por espectador y la contribución a la Hacienda Pública. Las cifras de ingreso de las celebraciones siguientes, 2018 y 2019, aumentaron progresivamente.

En datos de asistencia, los números no han dejado de crecer. Hace dos cursos, el Master 1000 madrileño logró registrar la visita de 270.097 espectadores. En el pasado año, la competición alcanzó su récord histórico con 278.000 asistentes, un 2,9% más respecto al 2018. Una media de 30.000 aficionados se acercó cada jornada a las instalaciones de la Caja Mágica.

La noticia ha sido un garro de agua fría tanto para los seguidores como para los propios jugadores. Las reacciones de los tenistas no se hicieron esperar una vez que la ATP (Asociación de Tenistas Profesionales) confirmarse la suspensión del evento. Entre ellos, Feliciano López mostró su resignación y declaró que «estamos muy decepcionados por la cancelación del torneo, había pocas esperanzas, pero ha sido un palo«. Recordemos que el de Toledo, aparte de ser uno de los participantes habituales, también forma parte de la organización de la competición.  

EL GODÓ TAMBIÉN SE CAE

Los campeonatos de tenis han ido cayendo al son del Coronavirus. Tras los aplazamientos de los Masters 1000 ATP de Indian Wells y Miami y el cierre de la gira americana de pista dura, las medidas han dado caza periplo de tierra europea.

Antes de que el Mutua Madrid Open pusiese el cartel de no pasar, el Godó ya cerró sus puertas. Hace más de una semana, el Barcelona Open Banc Sabadell-Trofeo Conde de Godó se unió a la larga lista de los torneos de raqueta que deberán suspenderse durante las próximas seis semanas.

La interrupción es una orden histórica para este campeonato, ya que desde su creación en 1953 nunca ha habido un precedente igual. La 68 edición del Conde de Godó estaba presupuestada en 11 millones de euros y su presidente, Jordi Cambra, explicó que, aunque “sean pérdidas asumibles” están trabajando para “intentar minimizar el impacto de las mismas», repartiéndolo entre «todos los implicados”.

Roland Garros sí que tiene fecha. La tierra batida parisina sí que abrirá su tapete, pero en septiembre de 2020. La modificación de su celebración sin consultar a nadie indica las urgencias monetarias tras una gran inversión. Sólo en premios, este Grand Slam reparte más de 40 millones de euros a los tenistas.