Lo que NUNCA te han contado del cigarrillo electrónico

Son muchas las personas que, guiadas por el sentimiento de querer dejar de fumar, han recurrido a la opción del cigarrillo electrónico. Al principio parecía que se había descubierto el vellocino de oro y las tiendas del codiciado cigarrillo electrónico comenzaron a multiplicarse y a aparecer en cada esquina.

Si eres fumador habitual seguramente también se te ha pasado por la cabeza comprarlo. Se trata de una mezcla de líquidos, algunos con nicotina y otros con sabores a frutas e incluso al mismo tabaco.

La sensación es similar a la de darle una calada a un cigarro e incluso hay modelos que te permiten variar a tu antojo la intensidad de humo que inhalas. Pero, ¿qué sabemos realmente de este producto?

Ahora que ya llevan nueve años en nuestro mercado sí se puede hablar de los efectos reales del cigarrillo electrónico. Te diré algunas cosas que puede ser que no supieses sobre él.

Se desconocen los efectos que tendrá a largo plazo.

Daños en los pulmones por el cigarrillo eletrónico

cigarrillo electrónico

Que el cigarrillo normal tiene consecuencias nefastas en los pulmones es más que una realidad, pero en el caso del cigarrillo electrónico sucede más o menos lo mismo.

Todo lo que se meta en los pulmones está alterándolo. Se han encontrado cambios en la función respiratoria de las personas que los consumen. Sí es cierto que en «menor grado» que el tabaco de toda la vida.

Algo que en este poco periodo de tiempo se está viendo son algunos casos de neumonía lipoidea en personas que consumen a todas horas los cigarrillos electrónicos.

Con respecto a la gran lucha entre el fumador y el fumador pasivo con respecto al cigarrillo electrónico, ¿qué sucede? Se han encontrado restos de cigarrillo electrónico como la cotinina en sangre o distintas sustancias volátiles en los pulmones de personas vapeadoras pasivas.  

El cerebro y el cigarrilo electrónico

cigarrillo electrónico

El enganche a la nicotina se sabe que físicamente no dura demasiado, pero psicológicamente es de por vida. Aunque hayas dejado de fumar hace muchísimos años, siempre te seguirá atrayendo el fumar un cigarro.

Si se fuma un cigarrillo electrónico sin nicotina no vas a tener mayor síntoma de abstinencia más que el costumbrismo. Sin embargo, si usas cigarrillos electrónicos con nicotina sí entra en juego la abstinencia y todos los problemas que eso conlleva.

Si dejas de fumar y en su lugar usas los cigarrillos electrónicos tu cuerpo nunca dejará el hábito de tener algo en las manos ni de echar humo y es más fácil que recaigas que si no lo usas.

El cigarrillo electrónico mantiene la adicción psicológica del tabaco.

Dientes

cigarrillo electrónico

Los paquetes de tabaco convencional te dejan muy claro con sus ilustraciones de las cajetillas el daño que le hace fumar a tus dientes y encías. Pero, ¿qué les provoca el cigarrillo electrónico? La salud de tus dientes, encías y boca también se ve perjudicada por el uso de este dispositivo.

Cuando aspiras el calentamiento de la nicotina, glicerina y demás componentes del cigarrillo electrónico exponen tu boca a esos productos. Los ingredientes del cigarrillo electrónico cuando entran en tu boca arrasan con multitud de células de tu mucosa bucal.

Si fumas el cigarrillo electrónico tu organismo no es capaz de defenderse de infecciones por microbios. Además, las células de tu boca sueltan proteínas inflamatorias nocivas.

Todo esto unido conlleva a que tengas con más frecuencia enfermedades como gingivitis o periodontitis.  

Otros motivos para no usarlo

cáncer

El cigarrillo electrónico desprende mayores niveles de níquel que el tabaco normal. Además, esta nueva forma de fumar te acelera el ritmo cardíaco y la cotinina en sangre.

Si no sabes usarlo muy bien puedes tragar la nicotina pura e intoxicarte. Si la maquinaria del cigarrillo electrónico está sucia u obstruida el líquido se te mete en la boca, se sale y te mancha. Hace falta un máster en química para hacer las mezclas de líquidos y otro en ingeniería para ser capaz de cambiarle las piezas que se le van estropeando.

La conclusión es que el cigarrillo electrónico entra dentro de los factores de riesgo a la hora de sufrir cáncer de pulmón o de boca.

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Es muy peligroso dejarlo cerca de los niños porque se pueden intoxicar.

Hace no tantos años ver a los protagonistas de nuestras películas favoritas fumando no era nada extraño y, sin embargo, hoy en día es impensable. Con el cigarrillo electrónico pasará igual. Cuando tus descendientes vean lo desinformados que estábamos se echarán las manos a la cabeza.