El comité de empresa de la planta valenciana de Ford en Almussafes ha remitido este jueves una petición a la dirección europea de Ford para que «considere» la planta de Almussafes «para construir los actuales y futuros motores híbridos para el mercado europeo», después de que Ford decidiera mover la producción de sus motores EcoBoost a Estados Unidos.
Carlos Faubel, el presidente del Comité de Empresa en Ford Almussafes, le ha transmitido este mensaje al presidente de la compañía en Europa, Stuart Rowley, en el marco de una reunión del Comité de Empresa Europeo en Colonia (Alemania), donde le ha hecho entrega de una resolución consensuada entre los cuatro sindicatos (UGT, CCOO, STM y CGT) con representación en la planta valenciana, la única que Ford tiene en España.
A raíz de la decisión adoptada por Ford Motor de adjudicar la nueva generación de motores EcoBoost a plantas de Norteamérica a partir del año 2022, en detrimento de la fábrica valenciana, su Comité de Empresa ha elaborado un escrito en el lamenta que «hayan prevalecido criterios políticos por encima de criterios económicos» con el argumento de acercar la fabricación de motores a la de vehículos para eliminar la creciente incertidumbre de costes de transporte, costes arancelarios y de tipo de cambio.
No obstante, espera que «con esa misma estrategia y por razones de rentabilidad para el negocio, se considere por parte de la compañía la planta valenciana para construir los actuales y futuros motores híbridos para el mercado europeo, muchos de los cuales se importan actualmente de fuera de Europa y se ensamblan en las plantas de vehículos europeas».
Durante más de 40 años, recuerda la misiva, la plantilla ha demostrado «profesionalidad, eficiencia y compromiso con todos los retos» que se le han requerido por parte de la compañía, siendo «un referente» en todos los ámbitos para Ford. «Y seguirá siendo así en el caso que se haga realidad alguna alternativa para Valencia».
Para los sindicatos, la «rentabilidad económica» obtenida todos estos años de la planta valenciana, así como la «flexibilidad» de sus instalaciones y de su plantilla, demuestran «capacidad de negociación y adaptación a las necesidades en cada momento» y son «plena garantía para el rediseño de negocio que Ford va a acometer durante los próximos años», apunta el texto.
En este sentido, subrayan que «no debe caber duda» sobre su «compromiso en seguir enfocados en satisfacer la demanda extraordinaria de motores para el mercado norteamericano», como se ha venido haciendo hasta la fecha, así como en «seguir centrados en conseguir que el lanzamiento del nuevo modelo Kuga, decisivo para la rentabilidad del negocio en Europa, sea un éxito.
EL PRESIDENTE DE FORD EUROPA «TOMA NOTA»
Así pues, el Comité de Empresa Europeo de Ford y el Comité de Empresa de Ford en Valencia demandan «estudios concretos que ofrezcan viabilidad» para la planta de Almussafes, que se responda «cuanto antes» a las propuestas planteadas y establecer un plan de seguimiento para dichas alternativas.
El presidente del Comité de Empresa en Almussafes y portavoz de UGT, Carlos Faubel, ha explicado en declaraciones a Europa Press que el presidente de Ford Europa ha asegurado que «toma nota» de la reflexión que le ha trasladado.
Faubel se ha mostrado convencido de que hay «futuro» para la fábrica valenciana con los motores híbridos, a pesar de que la factoría se enfrenta a «importantes retos» con todos los cambios que está experimentando el sector del automóvil, una industria cuya fisonomía habrá cambiado por completo en cinco años, ha augurado.