“La vida sin packaging es una utopía, pero que los océanos estén libres de plástico no lo es”. Con esta frase Jacques Reber, director general de Nestlé España, refuerza la apuesta de Nestlé por la sostenibilidad tras una inversión de 100 millones de euros desde 2010, cifra que se incrementará en los próximos años. Una necesidad que la multinacional convierte en ventaja para competir con la marca blanca.
“Si avanzamos en el medio ambiente es una ventaja competitiva”, ha explicado Reber como respuesta a la fuerte competencia de las marcas blancas. “Tenemos un negocio muy saludable y nos hace mejores frente a la competencia”, ha señalado durante un encuentro con los medios de comunicación en Madrid.
Entre 2010 y 2018, la multinacional suiza ha invertido 100 millones de euros en materia medioambiental en España. Algo que seguirá haciendo en los próximos años, aunque sin concretar una cifra. Si ha detallado que dichas inversiones irán destinadas a investigación, procesos de producción, productores y nuevas soluciones.
Entre las medidas que llevan años implementado se encuentra la eliminación de las pajitas de plástico a través de los nuevos batidos de Nesquik All Natural con pajitas de papel o la nueva botella realizada con un 25% de plástico PET reciclado diseñada por Mr. Wonderful.
Toda una inversión cuyo “coste no puede ser un argumento” para no apostar por la sostenibilidad y su cuestionada rentabilidad en los desarrollos empresariales. “Una parte de los consumidores están dispuestos a pagar algo más por estos productos”, justifica el director general, quien añade que “si no tenemos un modelo sostenible, no hay futuro”.
100% DE ENVASES RECICLABLES
Dentro de esta apuesta por la sostenibilidad, Nestlé se ha marcado una serie de objetivos como reducir a nivel mundial el uso de agua en un 30% por tonelada de producto en sus fábricas para el período 2010-2020. Objetivo que en España se ha duplicado. De este modo, sus fábricas ya han reducido en un 62% el uso de agua, cifra que representa un ahorro de más de 5 millones de metros cúbicos.
También espera alcanzar cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050; y aspira a que el 100% de sus envases sean reciclables o reutilizables en 2025, contribuyendo a la economía circular.
Nestlé ha invertido 100 millones de euros desde 2010 en sostenibilidad, cifra que se incrementará en los próximos años
En nuestro país, la división de aguas se compromete a que en 2023 todas las botellas de agua mineral, que en la actualidad ya son 100% reciclables, contengan, como mínimo, un 50% de plástico reciclado. El compromiso con los residuos está presente en las oficinas de Nestlé España ubicadas en Esplugues de Llobregat (Barcelona), así como en sus 10 centros de producción, de donde ya han desaparecido los artículos de plástico de un solo uso no reciclables. También se ha comprometido a generar cero residuos a vertedero en todas sus factorías para 2020.
Desde 2011, Nestlé cuenta en España con un Plan de Reciclaje Integral de Cápsulas con ayuntamientos y organismos oficiales que dispone en la actualidad de más de 1.600 puntos de recogida. Así, la multinacional con sede en Barcelona se hace cargo de todas las cápsulas de aluminio y plástico depositadas en los puntos de recogida municipales, tanto las propias como las de cualquier otra marca del mercado. «Como creador del sistema de cápsulas somos conscientes de la necesidad de dar una respuesta», apunta el director.
Por otro lado, Nestlé tiene el compromiso de reducir el desperdicio alimentario a la mitad para 2030. De momento, ya ha reducido en un 13% la pérdida de materia prima y materiales necesarios para elaborar los productos en las fábricas españolas entre 2014 y 2018.
